Buenas tardes. En primer lugar, muy agradecido por su elaborada respuesta. Lamento no haberle contestado antes, pero la vida no me da para más: casa, hijos, trabajo, formación, lectura, bicicleta de monte, ahora inversión…Y como te descuides en este foro y otros, en cuanto dejas de leerlo tres días se acumulan posts y casi no puedes encontrar ni lo que escribiste.
Vamos a ver si soy breve y conciso. Sí, de acuerdo totalmente con usted en cuanto a lo que dice de que las religiones son algo específicamente humano. Fíjese si será humano que desde el principio de los tiempos cuando el hombre no ha sabido dar una explicación a un hecho o fenómeno lo ha atribuido a una causa sobrenatural, o sea, las religiones son un recurso puramente humano para dar respuesta a lo desconocido. Es así, el ser humano trata de explicarlo todo y en esta seguimos. Por mi trabajo me relaciona con diferentes especialistas, un oftalmólogo me decía hace poco que la operación de cataratas que hoy en día es un procedimiento común y seguro, hace siglos, en occidente, era un castigo de Dios por haber pecado y mirado donde no se tenía que mirar, mientras que al mismo tiempo en oriente ya se hacían operaciones de este tipo (le aconsejo que vea la película El médico Yo me refiero, a que los dogmas de fe en los que se basan las religiones no son comprensibles ni comprobables para el ser humano. Pongamos la religión católica: la existencia de Dios, la existencia de Dios como objeto de fe, la unida de Dios, la eternidad de Dios, la Santísima Trinidad, Jesucristo es el verdadero Dios e hijo de Dios por esencia, la posesión de dos naturalezas en Jesucristo que no se transforman ni se mezclan, la concepción de Jesucristo en un vientre humano, la resurrección de la carne, etc. Todo esto y lo que plantean otras religiones, para nosotros, como seres emocionales y racionales, es imposible de comprender ni comprobar. Por mi trabajo, me paso muchas horas empujando camillas llevando a muchos pacientes al quirófano, quimioterapia, radioterapia, ecógrafo, etc., unas son personas religiosas otras no, pero todas esperan que el médico o especialista que les ha tocado acierte con el diagnóstico y el tratamiento aquí y ahora. No esperan a un tratamiento divino, aunque antes de entrar al quirófano se encomienden a Dios o después le den gracias.
No se trata de contraponer el humanismo a la religión, sino de diferenciarlos. La fe no es algo racional, me refiero a la fe que ignora el conocimiento no a la que busca el conocimiento para dar respuestas. Pensemos en Thomas Alva Edison, los cientos de experimentos que tuvo que hacer para inventar la bombilla, hasta que dio con la solución. Sin fe esto no se puede conseguir. Sin puentes que unan el cerebro humano con el conocimiento no se puede avanzar.
Las religiones positivas como el judaísmo, cristianismo, el islam, el budismo, claro que cumplen con una función civilizatoria a su manera y dentro de sus normas. No me voy a detener en la función civilizatoria del cristianismo en el descubrimiento de América y la conquista de países para extender el islam o el judaísmo, ya vemos en estos días en que se traduce.
Las religiones no son un mero mecanismo de defensa psicológico, son una salida vital ante la falta de respuestas a los interrogantes que el hombre se ha hecho desde siempre y precisamente por tratar de resolver situaciones cotidianas dándoles una perspectiva sobrenatural no hacen sino confundir al ser humano y paralizar un proceso de desarrollo aquí y ahora, sin esperar a premios, causas o soluciones sobrenaturales.
Para acabar y por cambiar de tercio, ya que estamos en un foro de economía, estoy empezando a leer el libro de John C. Bogle, Como invertir en fondos de inversión con sentido común y en la primera línea me encuentro con esta frase: “Ante todo, la inversión es un acto de fe, la voluntad de aplazar el consumo en el presente y ahorrar para el futuro.” Pues sí, y como dice este otro dicho: “La fe mueve montañas.”, claro, montañas de dinero. No, sí al final, sin fe no hay nada que hacer.
Nota. La frase que más me gusta es esta: “Hay que tener fe en uno mismo.”