Originalmente publicado en: ¿Qué protección ofrece el oro? – Asà es (si les parece)
Recupero para el blog un post que escribí hace cuatro años, y que siendo de carácter general, tiene elementos que son atemporales.
Si comparamos el oro con las otras commodities, podríamos definirlo como una de las más “emocionales”, donde hay varios factores que pueden afectar a la demanda y oferta de esta materia prima, más allá de los típicos temas de producción/extracción, estacionalidad, utilización etc, que afectan a las materias primas en general, porqué, además, se le atribuye una capacidad de protección contra varios eventos que pueden afectar a la rentabilidad de una cartera, lo cual puede crear una relación más «emocional», como decía antes, entre oro y inversor.
¿Cuáles son las propiedades terapéuticas o características que normalmente se atribuyen al oro?
1) Protección contra riesgos geopolíticos;
2) Protección contra mercado bajistas ;
3) Protección contra recesiones ;
4) Protección contra inflación ;
5) Protección contra una caída del US dólar.
Creo que detrás de estas creencias puede haber algo de realidad, en momentos concretos, sobre todo en relación a las expectativas que se crean y que se retroalimentan, pero también puede haber bastante mito, como a menudo ocurre en los mercados financieros con las opiniones generalmente aceptadas por la mayoría.
Vamos a comentar brevemente cada uno de ellos:
1) PROTECCIÓN CONTRAS RIESGOS GEOPOLÍTICOS
Aquí podemos incluir cualquier evento tipo conflicto regional que incremente el nivel de incertidumbre; en este caso es fácil pensar que el oro puede ofrecer un buen refugio en estas circunstancias.
En realidad observando algunos de los conflictos regionales más relevantes ocurridos en los último 25 años vemos que, en los mismos períodos, comprar acciones del Sp500 hubiera ofrecido una mayor protección que el oro.
2) PROTECCIÓN CONTRA MERCADOS BAJISTAS
Sería lógico esperar que el Oro tuviera un correlación inversa respecto a las acciones, para que este tipo de protección fuera eficiente; es decir, a grandes rasgos, si la bolsa baja el oro tendría que subir y viceversa.
Según un análisis de Thomson Reuter (1973 -2011) la correlación entre Oro y Sp500, en estos 38 años es del 0,02, lo que significa ninguna correlación.
El oro es una commodity muy volátil (más volátil que el Sp500 en el mismo periodo de análisis), y que se mueve por sus leyes de demanda y oferta y lo que haga la bolsa no es uno de los elementos principales de influencia.
3) PROTECCIÓN CONTRA RECESIONES
Si miramos como se ha comportado el oro durante las recesiones, nos encontramos con esto:
El gráfico de arriba muestra el precio del oro junto con las barras grises que representan los periodos oficiales de recesión de Estados Unidos.
Los porcentajes verdes muestran como ha sido la evolución del oro durante esos periodos y lo que se puede notar es una fuerte variación de rentabilidad que en cuatro periodos de recesión se ha quedado por debajo del 5%.
Considerado que las mayores subidas del oro se han producido fuera y lejos de periodos de decrecimiento económico, no me parece que, a parte la recesión del 74, parcialmente la del 2008, el oro haya proporcionado mucha protección.
4) PROTECCIÓN CONTRA LA INFLACIÓN
Esta es una de las características más conocida del oro, aunque no siempre funciona de forma muy directa.
Como ejemplo podemos comparar dos décadas: las de los años ´90 y la siguiente.
La inflación ha sido ligeramente más alta en la primera década (3% anualizado), respecto a la segunda década (2,6% anualizado), sin embargo el oro ha perdido más de un 30% de su valor en la década de los ´90, mientras que se ha multiplicado por 5 en la siguiente década, con menor presión de la inflación. Está claro que es un comportamiento un poco raro para un activo que supuestamente tiene que actuar como refugio frente a las subidas de precios.
5) PROTECCIÓN CONTRA SUBIDAS DEL US DÓLAR
Esta es probablemente la relación más clara, porqué es técnica, y que se extiende a todas las commodities.
El precio de todas ellas se denomina en US dólares y por esa razón cuando la divisa estadunidense sube el precio de las commodities, coeteris paribus, tiende a moverse en dirección opuesta.
Aun así, siendo esta relación un hecho, si se comparan las series históricas se pueden notar periodos en los cuales el movimiento de ambos activos se mueven en la misma dirección.
En el gráfico de arriba se analiza la correlación a 90 días entre US$ y Oro se notan tres periodos (en el recuadro superior donde se gráfica el coefficiente de correlación) en los cuales la línea de la correlación supera el 0,5 acercándose a la zona de correlación positiva, y durante mucho tiempo la correlación se queda entre 0,5 y – 0,5 indicando la ausencia de correlación significativa entre oro y US$
CONCLUSION
Si intento responder a la pregunta inicial “¿Qué protección ofrece el oro?”, en mi opinión es sobre todo es una protección ligada a la genérica diversificación que pueda ofrecer un activo con baja correlación con otros activos y que , en consecuencia, podría suavizar las excursiones de la cartera tanto para arriba como para abajo.
También se podría incluir el aspecto psicológico de poseer un activo físico, de la misma forma que se podría considerar un activo inmobiliario, cuya trascendencia puede ir más allá de las consideraciones de optimización financieras.
El oro es, al final de todo, una commodity cuya oferta es relativamente estable y cuya demanda puede oscilar de forma muy significativa y de forma muy poco previsible.
Históricamente ha proporcionado una rentabilidad significativamente inferior a la renta variable (alrededor de un 3% anualizado menos que el Sp500 desde el 1973 cuando el oro ha empezado a cotizar libremente), con una volatilidad significativamente superior, un aspecto del cual hay que ser consciente, antes de incluirlo en cartera.