Amortización de Activos Intangibles Adquiridos

Originalmente publicado en: https://blogs.masdividendos.com/helmonomics/2020/10/25/amortizacion-de-activos-intangibles-adquiridos/

El valor de una empresa es igual a la suma de los flujos de caja futuros ajustados de manera que reflejen el valor temporal del dinero. Estos flujos de caja estarán totalmente determinados por las ventas, los márgenes y la eficiencia de activos.

El trabajo del inversor consiste, pues, en pronosticar estos generadores de valor y, posteriormente, transformar, de una u otra forma, este desempeño futuro esperado en una valoración que sirva como criterio para tomar decisiones de inversión.

En este contexto, monitorizar los generadores de valor presentes y pasados, puede potencialmente servir como punto de partida para el análisis.

Al llevar a cabo esta tarea en empresas que realizan o han realizado adquisiciones de otras empresas, nos encontramos con una situación digna de ser analizada con más detalle.

En una adquisición, podemos distinguir 3 tipos de activos de largo plazo que van a ser contabilizados en el balance: los activos tangibles, los activos intangibles identificables y el fondo de comercio.

Los activos tangibles son los activos que tienen forma física como los edificios, maquinaria, equipamiento, etc.

Los activos intangibles son aquellos que carecen de forma física, como las patentes, derechos de autor, marcas, etc. Los activos intangibles identificables son, como su propio nombre indica, aquellos que pueden ser identificados, y que, además: están bajo el control de la compañía, se espera de ellos que generen beneficios y se pueden valorar de forma fiable. Dentro de los activos intangibles identificables podemos distinguir los que tienen vida finita y los que tienen vida infinita.

El fondo de comercio engloba todos los activos intangibles no identificables y surge cuando la empresa adquiriente paga un precio de adquisición por encima del valor de los activos identificables, tanto los tangibles como los intangibles.

Tras la operación corporativa, los activos tangibles y los activos intangibles identificables con vida finita son depreciados y amortizados en los siguientes períodos de acuerdo con su vida útil. El término depreciación se utiliza para los activos tangibles mientras que el término amortización se utiliza para los intangibles.

Frente a esta situación, salvo en un número limitado de casos, los activos intangibles desarrollados internamente no son activados en el balance y pasan como gastos por la cuenta de resultados.

Echemos un vistazo al caso de Medtronic, que adquirió Covidien en 2015.

Esta es la evolución de los activos intangibles en la última década:

Podemos observar como aumentan en el momento de la adquisición y luego empiezan a descender paulatinamente debido a la amortización.

Esta es la amortización de activos intangibles de la última década:

Finalmente, estos son los márgenes operativos de los últimos 10 años:

Vemos como tras la adquisición, la empresa pasa a operar con márgenes operativos sustancialmente menores. En parte puede deberse a que Covidien es una compañía con una posición competitiva más débil. Pero sin duda, la amortización de los activos intangibles también influye en este resultado.

Por otro lado, esta la evolución de la eficiencia de activos en la última década:

Observamos como la eficiencia de activos disminuye brutalmente después de la adquisición como consecuencia de la activación del fondo de comercio y los activos intangibles identificables, para luego empezar a crecer poco a poco conforme los activos intangibles son amortizados.

¿Representan este nuevo margen operativo y esta tendencia al alza en la eficiencia de activos la economía subyacente de la empresa? ¿Son un buen punto de partida para intentar prever el desempeño futuro de Medtronic?

Según el Valuation de McKinsey, no. Koller et al. nos sugieren sumar de vuelta la amortización de los intangibles, es decir, utilizar el EBITA (no el EBITDA o el EBIT) como beneficio operativo y restituir el valor original de los activos intangibles en el balance.

La explicación es que como la mayoría de los intangibles desarrollados internamente no se activan en el balance y se cargan como gastos, una empresa que esté gastando en reponer los activos intangibles adquiridos conforme pierden su capacidad de generar ventas y, a la vez, esté amortizando esos mismos activos, está penalizando su cuenta de pérdidas y ganancias por partida doble.

Por supuesto, este marco conceptual abre la puerta a que tengamos una imagen más optimista de lo que deberíamos de las empresas que no están gastando lo suficiente en reponer sus activos intangibles. Pero lo cierto es que este problema puede surgir al analizar cualquier tipo de empresa, no sólo aquellas que han hecho grandes adquisiciones.

De cualquier modo, estos serían los márgenes operativos una vez sumada de vuelta la amortización de los intangibles:

Vemos como la diferencia entre los márgenes antes y después de la adquisición se cierra sustancialmente, siendo el nuevo margen operativo mayor.

Estas serían las eficiencias de activos históricas una vez restituidos los valores iniciales de los activos intangibles:

Observamos como la nueva eficiencia de activos es menor y la tendencia alcista prácticamente desaparece.

En cualquier caso, con independencia del método que utilicemos, parece que la clave está en ser consistente. Si ajustamos al alza los beneficios deberíamos también ajustar al alza los activos invertidos necesarios para generar esos beneficios. De otra manera, nos podría pasar como a los analistas que no cuestionaron las presentaciones de Valeant donde se sumaban de vuelta las amortizaciones de los medicamentos adquiridos porque no eran salidas reales de efectivo, sin tener en cuenta que las patentes de estos fármacos tenían una vida limitada y se requerirían nuevas inversiones para mantener el mismo nivel de ventas. Casualidad o no, Michael Pearson, CEO de Valeant, trabajó durante más de 2 décadas en McKinsey & Company.

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@Helm, por mi parte solo me queda agradecerle el tiempo que le dedica a escribir con rigor y una calidad excepcionales. Cada artículo suyo es como una pequeña “master class” para los que queremos iniciarnos en la valoración de empresas y protegernos poniendo los pies en la tierra de esos análisis cualitativos de barra de bar y narrativas en los que es tan fácil caer.

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Creo que ya sabe que se encuentra entre mis autores favoritos. La facilidad para articular asuntos complejos, desgranándolos en razonamientos entendibles para los que no tenemos su grado de conocimiento es simplemente excepcional.

Ojalá la Comunidad +D valore el lujo que es tener acceso a este nivel de conocimiento de manera universal y gratuita.

Nunca podremos agradecerles lo suficiente todo lo que ustedes aportan.

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Muchas gracias por su clara exposición @Helm. Cada día aprendo más en este foro con el alto nivel de sus partícipes.
Además, un servidor con escasos conocimientos de análisis de empresas, presta más atención se comenta la empresa en la que trabaja. :wink: Gracias

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He disfrutado mucho leyéndole @Helm.
Qué difícil es identificar gastos que pasan por PyG y no se activan y qué difícil es diferenciar el CAPEX de mantenimiento, del de expansión si es que se activan.

Por otro lado,
¿Cómo nos recomendaría analizar el Goodwill?
Al final es un reflejo en un balance de que cuando se ha comprado otra compañía, al integrarla en tus cuentas, se ha pagado por encima de lo que esa empresa “tenía” y tienes que anotarte esa diferencia en esa partida.

La pregunta más concreta sería:

Además del EBITA para ver cómo es de rentable (EBIT) la empresa tras la adquisición si se hubiera pagado a precio de valor en libros, ¿Qué otra manera tendríamos para ver que la empresa a futuro no va a necesitar seguir haciendo más compras para mantener ese propio margen?

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@jvas, hace un año que mandaron a unos señores de Bielorrusia para “invitar” amistosamente al señor @Helm para participar en un podcast.

Espero que no les hayan pagado un anticipo aún porque o en Holanda hay muchos escondites, o tienen grabado ese podcast y no nos lo comparten o, esos señores del Este no cumplen con el encargo!

Díganle a Dimitri y compañía que sean más persistentes!

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Gracias a todos por la acogida, es un lujo formar parte de esta comunidad.

Mirar el retorno sobre activos sin el fondo de comercio para caracterizar la posición competitiva del negocio y el retorno sobre activos con el fondo de comercio para evaluar la asignación de capital de los responsables de la empresa.

Teniendo en cuenta que esta última medida puede ser engañosa, ya que podemos encontrarnos con una foto estática donde aparentemente el retorno es bajo, pero la empresa termine creciendo beneficios a una tasa alta con muy poco capital adicional.

Luego ya, con respecto a valorar, si uno considera que la empresa va a seguir haciendo adquisiciones, lo suyo sería modelar un retorno sobre activos más parecido al histórico con fondo de comercio; y si pensamos que ha sido una cosa puntual y que va a seguir creciendo orgánicamente, con el retorno histórico sin fondo de comercio.

Al final, para tener una idea bastante aproximada de la economía subyacente de un empresa, no hay más remedio que conocer bien el negocio. Desafortunadamente, en muchas ocasiones, ni siquiera va a ser suficiente, porque todo lo relevante está por suceder, y adivinar el futuro es siempre complicado.

Mi intención ha sido simplemente plantear el problema, no pretender darle una solución :grimacing:

Saludos!

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Normalmente, el retorno sobre activos suele utilizarse a través del NOPAT que básicamente es el EBIT * (1-T) .

image

Mi pregunta es, si realizamos esto sin el Goodwill, ¿No deberíamos de hacer este cálculo sumando la D para quitar la depreciación del Goodwill? Habría que hacer también la “trampa” con T claro.

Aquí es donde yo he visto normalmente que se calcula el ROIC o ROCE sin el Goodwill para ver cómo es realmente de rentable el negocio sin valorar las decisiones de compra del management, pero sí utilizando la depreciación del mismo. Por lo que estamos mezclando cosas a la hora de calcularlo.

Aquí es a donde quería llegar!

Sin duda @Helm, aunque parezca breve este artículo que nos ha traído, tiene horas y horas para maltratar a la sesera!

Muchas gracias por todo!

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Bueno, en principio, el fondo de comercio no se amortiza. Se evalúa de forma regular para ver si ha sufrido algún “daño” y sólo entonces se pasa como gasto por cuenta de resultados.

En ese caso, estoy de acuerdo con usted, que lo más razonable es sumar de vuelta el impairment para que haya consistencia entre numerador y denominador. De otra forma, estaríamos, efectivamente, mezclando cosas.

Entonces encontrará en @Fernando a un aliado, ya que es un gran defensor de esa idea, como atestigua su tropecientos bagger en TMO :grin:

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Muchas gracias, @Helm por aclarar ( y explicar) un tema tan escabroso como los intangibles y su conexion con las trampas.
Es para leerlo con calma y repasar.

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Me sumo a las felicitaciones por el estupendo post inaugural de su blog.
En otro post anterior, que recomiendo a quién no lo haya leído, nos comentaba la conveniencia de capitalizar los gastos en R&D, sobre todo en empresas en las que supone un gasto importante y necesario para la continuidad del negocio. En el cálculo del nuevo NOPAT ajustado se sumaba de vuelta el gasto en R&D y a su vez se procedían a amortizar los intangibles capitalizados.
Mi pregunta es si estos ajustes son compatibles con estos otros que nos propone. Si una empresa realiza una adquisición que incorpora una suma importante de intangibles y estos no los amortizamos y al mismo tiempo tampoco contabilizamos el gasto en R&D como tal, ¿no estaríamos sobrevalorando el NOPAT de los próximos años?

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Qué interesante se está volviendo este hilo!

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Muy buena pregunta. Efectivamente, las dos técnicas no son compatibles. Si activamos y amortizamos los gastos para desarrollar internamente intangibles, no deberíamos sumar de vuelta la amortización de los intangibles adquiridos, ni restituir el valor de adquisición de los mismos en el balance. Porque ya no estamos corriendo el riesgo de castigar por partida doble la cuenta de resultados.

El problema práctico que creo que surge es que el coste de adquirir intangibles a precio de mercado es con toda seguridad mayor que el coste de desarrollarlos internamente. Con lo que dos activos en principio igual de capaces de generar beneficios en el futuro, uno adquirido y el otro desarrollado internamente, tendrán amortizaciones distintas, y pueden potencialmente llevarnos a formarnos juicios erróneos sobre la economía subyacente del negocio.

Saludos!

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Lo primero: enorme post @Helm. !Felicidades!

Creo que me encuentro en un punto intermedio (o algo así :sweat_smile:) entre la postura de @helm y la de @camacho113. Me explico: en general creo que lo “correcto” es lo que explica fenomenalmente bien @helm pero luego también pienso que hay una serie de casos, digamos excepcionales, en los que tiene todo el sentido hacer justamente lo contrario. Un ejemplo extremo (y esto ocurre) sería una empresa que adquiere unos activos con una vida útil que tiende a infinito. ¿Cuál es el sentido de la amortización de intangibles ahí? Luego en el caso de las empresas que realizan compras habituales y sistemáticas (TMO, DHR…) yo si creo que la amortización y la depreciación esconden un valor oculto pero es un mundo en el que hay que tener cuidado. Es gracioso como una de las empresas que inventó esto ha sido The Home Depot (quien lo iba a pensar de una ferretería). Durante mucho tiempo HD realizó muy buenas compras para consolidar su mercado que al amortizar hacían parecer a la acción mucho más cara de lo que en realidad estaba durante un periodo de tiempo muy prolongado y ya saben: las grandes componedoras suelen serlo por “padecer” periodos muy largos de infravaloración. Ojo que puede ocurrir que la empresa lo que compre sean todo pufos (eso hay que mirarlo bien).

Un mundo complicado en el que tengo más preguntas que respuestas; muchas veces pienso que, en este sentido, las empresas muestran lo que quieren mostrar.

Algo que me encanta para finalizar: empresas compradoras que explican abiertamente como le va a afectar a su ROIC futuro, las futuras compras que puedan realizar. Lamentablemente, no abundan mucho y muchas veces existen además incentivos para que las empresas crezcan sin rentabilidad.

Igual me he desviado un poco del tema. Sorry :rofl:

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Muchas gracias @Helm por su post y por el tiempo que dedica a aclarar conceptos y a hacer más inteligibles muchos aspectos a los neófitos como un servidor. Leer sus valiosas aportaciones es siempre un placer.

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Durante las últimas cinco décadas los intangibles del S&P500 pasaron de conformar el 17% de los activos total al 90% actual:

Yendo a la fuente del estudio, en Europa (Europe 350 index) los intangibles pesan el 74%, mientras que en bolsas asiáticas (Shenzhen CSI 300, KOSDAQ, Nikkei-225) rondan entre el 27% y el 35% de los activos.

Lo que no se aclara y sería interesante mirar es la desagregación entre los intangibles identificables y los no identificables.

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Hola,

Me da la impresión que la metodología es: como el ratio entre el precio y el capital empleado ha aumentado, y el precio está siempre bien, la diferencia tiene que deberse a activos intangibles. Asumiendo que los activos intangibles son tales que el ratio precio entre capital empleado permanece constante.

Si el procedimiento es más o menos ese. Yo, sinceramente, no lo veo. Se me ocurren al menos 2 formas mejores.

La primera es simplemente tratar contablemente tanto los activos tangibles como los intangibles de la misma manera: capitalizando y amortizando. Luego ya mirar la proporción de unos y otros.

La segunda es mirar el exceso de retornos sobre el capital empleado, todo lo que sea mayor de un hipotético coste del capital tiene que ser debido a la existencia de “algo” que impide que la competencia erosione el retorno. Como hice aquí para L’oreal:


Saludos!

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Hola, paso por aquí para dejar una cosa curiosa del fondo de comercio y su amortización en una empresa española, como es el caso de Vidrala:

Hay empresas españolas que sí que lo amortizan y otras que no. ¿Por qué?

Ahora la pregunta es:
¿Cómo se hace eso?

Sabemos que la regulación del Fondo de Comercio ha sido objeto de “demasiadas” modificaciones en los últimos años. Antes de la entrada en vigor del Plan Contable actual, se permitía su amortización contable y fiscal, cosa que cambió en el año 2008 donde no se permite su amortización contable pero si su deducibilidad fiscal siempre y cuando dotáramos una reserva indisponible., Ahora, con la reforma en marcha, parece que volvemos al punto de partida.

El artículo 10.3 de la Ley 27/2014, de 27 de noviembre, del Impuesto sobre Sociedades (en adelante, LIS), establece que:

“3. En el método de estimación directa, la base imponible se calculará, corrigiendo, mediante la aplicación de los preceptos establecidos en esta Ley, el resultado contable determinado de acuerdo con las normas previstas en el Código de Comercio, en las demás leyes relativas a dicha determinación y en las disposiciones que se dicten en desarrollo de las citadas normas.”

Asimismo, el artículo 11 de la LIS establece que:

(…)

3. 1.º No serán fiscalmente deducibles los gastos que no se hayan imputado contablemente en la cuenta de pérdidas y ganancias o en una cuenta de reservas si así lo establece una norma legal o reglamentaria, a excepción de lo previsto en esta Ley respecto de los elementos patrimoniales que puedan amortizarse libremente o de forma acelerada.

(…)”

A efectos contables, el Plan General de Contabilidad, aprobado por el Real Decreto 1514/2007, de 16 de noviembre, en su redacción vigente para los ejercicios que se inicien a partir del 1 de enero de 2016, en su segunda parte, en la norma de registro y valoración 6.ª Normas particulares sobre el inmovilizado intangible, establece que:

“(…)

c) Fondo de comercio. Sólo podrá figurar en el activo, cuando su valor se ponga de manifiesto en virtud de una adquisición onerosa, en el contexto de una combinación de negocios.

Su importe se determinará de acuerdo con lo indicado en la norma relativa a combinaciones de negocios y deberá asignarse desde la fecha de adquisición entre cada una de las unidades generadoras de efectivo de la empresa, sobre las que se espere que recaigan los beneficios de las sinergias de la combinación de negocios.

Con posterioridad al reconocimiento inicial, el fondo de comercio se valorará por su precio de adquisición menos la amortización acumulada y, en su caso, el importe acumulado de las correcciones valorativas por deterioro reconocidas.

El fondo de comercio se amortizará durante su vida útil. La vida útil se determinará de forma separada para cada unidad generadora de efectivo a la que se le haya asignado fondo de comercio.

Se presumirá, salvo prueba en contrario, que la vida útil del fondo de comercio es de diez años y que su recuperación es lineal.

Además, al menos anualmente, se analizará si existen indicios de deterioro de valor de las unidades generadoras de efectivo a las que se haya asignado un fondo de comercio, y, en caso de que los haya, se comprobará su eventual deterioro de valor de acuerdo con lo indicado en el apartado 2.2 de la norma relativa al inmovilizado material.

Las correcciones valorativas por deterioro reconocidas en el fondo de comercio no serán objeto de reversión en los ejercicios posteriores.

(…)”

A su vez, en la norma de registro y valoración 19.ª Combinaciones de negocios, establece que:

“(…)

El exceso, en la fecha de adquisición, del coste de la combinación de negocios sobre el valor de los activos identificables adquiridos menos el de los pasivos asumidos en los términos recogidos en el apartado anterior, se reconocerá como un fondo de comercio.

Al fondo de comercio le serán de aplicación los criterios contenidos en la norma relativa a normas particulares sobre el inmovilizado intangible.

(…)”

El artículo 12.2 de la LIS, en su redacción vigente para los períodos impositivos que se inicien a partir de 1 de enero de 2016, establece que:

“2. El inmovilizado intangible se amortizará atendiendo a su vida útil. Cuando la misma no pueda estimarse de manera fiable, la amortización será deducible con el límite anual máximo de la veinteava parte de su importe.

La amortización del fondo de comercio será deducible con el límite anual máximo de la veinteava parte de su importe.”

Por tanto, en caso de que se pusiera de manifiesto en la adquisición de un negocio un fondo de comercio en los términos anteriores, su amortización contable tendrá la consideración de gasto fiscalmente deducible en los términos establecidos en el artículo 12.2 de la LIS, anteriormente reproducido.

Espero haberles ayudado con este texto donde podrán observar que no es lo mismo la amortización fiscal, de la contable.

Aquí en el blog de BDO lo explican bien:

Desde que las NIIF salieron en el año 2019, no se permite a las empresas que presentan bajo esas normas, amortizar el fondo de comercio.

De acuerdo con la Norma Internacional de Información Financiera 3 (NIIF 3) – Combinaciones de Negocios como: “El fondo de comercio adquirido en una combinación de negocios representa un pago realizado por la adquirente como anticipo de beneficios económicos futuros de los activos que no hayan podido ser identificados individualmente y reconocidos por separado.”

Asimismo, la NIIF 3 establece que el fondo de comercio no se amortiza, sino que, en su lugar, la entidad adquirente analizará el deterioro del valor anualmente, o con una frecuencia mayor, si los eventos o cambios en las circunstancias indican que su valor ha podido sufrir un deterioro. Los aspectos clave del test de deterioro son la base de valor empleado (valor en uso o valor razonable menos costes de venta), las hipótesis y parámetros de valoración (proyecciones financieras empleadas, tasa de descuento, tasa de crecimiento a perpetuidad, etc.).

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Es usted un pozo de sabiduría @camacho113

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