Efectivamente todos tenemos nuestros sesgos.
Sin embargo creo que es un error pretender que a todos deban gustarnos todos los tipos de activos o buscarles una utilidad única que uno, en cierta forma, no puede intentar buscar de otras formas.
Parece que en el caso de Buffett hay quien le molesta bastante más su “desdén” hacia el oro, por tratarse de quien se trata. Sin embargo harían bien en ver como invierte Buffett para darse cuenta que su forma de entender la inversión, que no es la única posible, está bastante alejado de muchas de las premisas de las que parecen partir ellos.
Recordando el magnífico post Admiramos a Buffett y Munger pero , no es sólo que Buffett no tenga oro, es que le gusta acumular liquidez en dólares y tiene parte significativa de sus inversiones cotizadas (y de las no cotizadas) en el sector financiero, que precisamente es uno de los que suele provocar más repulsa en algunos de los seguidores del oro, ojo no en todos.
Eso no significa que uno no deba de tener oro. Debe de valorar las característica del oro, entender posibles ventajas e inconvenientes, y ver si le interesan para intentar aprovecharlas asumiendo su posible factura, o prefiere buscar otras formas de intentar hacerlo.
Si miran el gráfico de la cotización histórica del oro, ajustada a inflación, verán que según que tesis de inversión, siguen siendo igual de válidas, si dentro de 15 años el oro cotiza a 750$ como si cotiza a 7500$. Tal vez ese es uno de los mayores problemas del oro, en que medida se traducen sus propiedades peculiares en valor real, que lo tiene, pero que creo que es complicadísimo ajustar.
Cuando comentamos que la RV, especialmente a corto/medio plazo tiende a maximizar el comportamiento de los inversores, creo que en el caso del oro, hay quien olvida que sufre del mismo efecto. Vamos que el carácter especulativo del oro hay que tenerlo en cuenta en gran medida y no esconderlo debajo de algo posiblemente cierto, que mantiene a larguísimo plazo el poder adquisitivo.