Permítanme que ponga en este hilo la carta anual de Numantia:
https://twitter.com/foso_defensivo/status/1321236776804143104?s=20
Habiéndola leído por encima de momento, a causa de varias obligaciones, les diré que me parece la mejor carta con diferencia de cuantas he podido leer de los gestores activos nacionales.
Creo que habla por sí sola y no me quiero deshacer en halagos. Dejaré a los foreros que juzguen y comparen por ellos mismos.
Y de todos modos no es el esmero y la rigurosidad de la carta lo que quería yo resaltar. Tampoco es el hecho -en mi opinión cada vez más patente- de que este chico piensa por sí solo (hasta en la forma de abordar la carta a sus copartícipes). En lo que quiero poner el foco es en la transparencia y en la alineación de intereses.
Emérito hace públicas sus aportaciones personales, el capital invertido de su familia, habla sin reservas de sus posiciones constantemente sin miedo a que le copien, etc. Además, no parece que su patrimonio sea bochornosamente elevado y que, a estas alturas, sus ingresos por comisiones puedan entorpecer el verdadero objetivo del fondo, que no es otro que maximizar su revalorización. Por no hablar de que el interés de Emérito, en estos primeros años de vida, es el de forjarse un nombre en el panorama inversor. Y para esto los resultados que coseche serán su mejor carta de presentación. Se puede argumentar que aquí sí parece haber verdadero skin in the game.
En efecto la experiencia es un grado (pienso aquí en los ex Bestinver). Pero la osadía de los jóvenes también tiene valor. Normalmente gozan de mayor capacidad de adaptación y menor apoltronamiento. No es algo baladí.
Y, como comenté en otro hilo que aquí enlazo, a igualdad de capacidad de generación de alfa deme al gestor con más skin in the game. De calle.