Hay que intentar entender el tipo de gestión que realizan los fondos y el posible impacto que eso puede tener sobre resultados.
Fondos y gestores muy centrados en un tipo de sector/valor cuando destaca ese sector/tipo de valor destacan muy en positivo pero si se gira la tortilla pueden hacerlo en negativo.
Ya lo dicen que el inversor de fondos suele sacar en promedio una rentabilidad inferior que los propios fondos activos. Atribuye demasiado a la habilidad del gestor, aspectos que tienen más que ver con el tipo de gestión realizada.
Cuesta entender que un fondo que un año le saca un 20% o más a su índice de referencia otro año se puede quedar ese mismo 20% o más por detrás. Su capacidad de diferenciarse del índice a veces actúa a favor otras en contra.
Es algo que hay que entender del track error respecto a un índice de referencia. Ese diferencial en positivo, hay que saber que también se puede producir en negativo, por mucho que el gestor sea hábil y sepa invertir, el estilo y la forma de implementar una estrategia, le lleva a una diferenciación del mercado que puede terminar apareciendo en un sentido u otro.
Los que llevamos años en foros de inversión por ejemplo sabemos de sobra que en el caso de los fondos sectoriales, hay no pocos inversores que no soportan cuando su fondo sectorial lo hace sensiblemente peor que un fondo más generalista. Aunque un fondo parezca más diversificado sectorialmente (o geográficamente), si es capaz de sacarle mucho a un índice, es que en otros aspectos está más “concentrado” que el índice muy posiblemente y por lo tanto hay que asumir que esa “dispersión” positiva puede aparecer en negativo.