La gente de hoy en día seguramente que aún no, pero la que está creciendo hoy en día…
1 me gusta
Gracias @buso por el enlace de la entrevista a Pérez Reverte, es revelador y ayuda al debate.
2 Me gusta
Para los que somos aficionados a la historia y particularmente a la 2ª Guerra Mundial no nos pilla de sorpresa lo que cuenta Reverte en esta entrevista. Sí, en la guerra se mata y se muere y seguramente la mayoría de nosotros en una situación extrema así cometeríamos atrocidades de las que nos creemos incapaces. Yo me siento muy afortunado de no haber averiguado hasta ahora si soy capaz y espero no verme en la obligación nunca.
19 Me gusta
Le entiendo y comparto su dicha perteneciendo a una de las pocas generaciones de europeos que no ha vivido un guerra en sus carnes. Es más, yo nací durante el tardofranquismo y solo he visto prosperidad; hasta buscar trabajo, un buen trabajo, me fue fácil después de terminar la carrera.
Creo que no logro explicarme: desde luego estoy satisfecho de los logros que se han conseguido en los últimos 50 años en España, Europa y occidente en general. ¿Pero ese camino que tomamos sigue siendo bueno? Por ejemplo, hace unas décadas China era pobre; ahora está a punto de ser la primera potencia económica. Hace unas décadas fabricábamos en Japón, luego en Corea y en China nuestros (occidentales, desde luego muchos de EE. UU.) productos tecnológicos ¿Qué tecnología fabricamos ahora en Europa? ¿Cómo sube China y bajamos nosotros?
No sé explicarme, pondré un ejemplo y seré desafortunado: Sten Gustaf Thulin, el inventor de la bolsas de plástico quería ayudar al planeta evitando la tala de árboles para fabricar bolsas de papel. Ahora son un problema ecológico.
Soy pesimista. Espero estar equivocado. De verdad, porque mi proyección del futuro es peor que la suya.
2 Me gusta
Pues justo al hilo de todo lo que está comentando: historia, IIª guerra mundial, de como la situación puede influir en nuestros actos, y no solo como individuos, sino como sociedad; y además también del mundo de las finanzas; me ha venido a la mente un libro que me gustó mucho y me parece altamente recomendable: “Cuando muere el dinero” de Adam Fergusson. En Alianza Editorial. Se puede ver, como las penalidades de la sociedad alemana de los años 20, forjaron las mentalidades y actos de los años 30.
Por si a alguien le pudiera resultar interesante.
3 Me gusta
Se he comentado el libro en alguna ocasión y, en más ocasiones, el famoso episodio de la hiperinflación alemana.
En mi opinión tal vez lo más complicado es no ver el episodio como algo aislado y ver el contexto de una época complicadísima donde el inversor habría sufrido de lo lindo, a nivel económico y a nivel personal. Aunque no fuera alemán.
3 Me gusta
Son varias veces, nunca suficientes, las que se ha repetido ya a lo largo del hilo la conveniencia del deporte, de la alimentación, de la obtención incesante de conocimiento, de la reserva de un tiempo —este el más sagrado— para la familia, para los amigos, etc.
Por mi parte, quería aportar mi granito de arena al hilo contando que en 2016 me animé a comenzar a estudiar una carrera, que felizmente estoy acabando este año 2023, a pesar de lo duro que ha resultado compaginarla con trabajo y familia (vivo con mi mujer y un hijo que nació durante el estos años de estudio).
En el pasado, cuando llegó el momento de hacerlo, después de acabar COU, problemas personales hicieron que me sintiese incapaz y desde entonces continué viviendo con la frustración de no haber ido a la universidad. Una frustración que no tiene por qué ser universalizable, pero que era la mía; con el agravante de no haberlo conseguido por culpa de lo que entendía que había sido una cobardía, una falta de afrontamiento de aquellos problemas.
El caso no es tan extraordinario, y haber concretado cuál fue mi objetivo solo ha sido para intentar añadir capacidad explicativa al relato.
Lo más importante para mí es poner sobre el tapete aquello de que “nunca es tarde si la dicha es buena”.
Desde hace años, eso que ha venido a llamarse “la industria de la felicidad” ha convertido algunos lugares en excesivamente comunes. Tanto, que hasta decir que son lugares comunes se ha convertido en un lugar común. Se encuentra entre ellos el que reza que “Si persigues tus sueños, se harán realidad”. Esta es la forma más dulcificada de expresar algo que no por llegar a ser aborrecible, deja de contener un germen extraordinariamente aprovechable. Aún hoy, y siempre.
No sé si a ustedes les sucede. A mi alrededor no dejo de escuchar cómo la ausencia de esfuerzo y de trabajo en pos de objetivos se justifica con una presunta falta de talento, con una presunta edad ya para entonces excesivamente avanzada, con una presunta falta de tiempo, etc. Después, los informes de uso de los smartphones arrojan datos escalofriantes sobre tiempo de estancia en redes. Muchos de quienes se quejan de falta de tiempo consumen una o dos series por semana y no se pierden ni un “Chiringuito de jugones”. El problema, por supuesto, no es consumir lo que cada uno quiera, sino la contradicción dentro del marco de una queja.
Sé que todo ello son excusas porque estoy bien seguro de ser una persona totalmente normal y corriente, no mejor dotada que la mayoría ni para el objetivo que me planteé, ni para ningún otro.
La verdad, creo, en la mayoría de ocasiones, es que no nos da el resuello ni para aguantar una dieta durante una semana, y preferimos contarnos mentiras personales, en realidad mucho peores, como que no tenemos talento, o como que ya hemos llegado tarde para conseguir un trabajo que nos realice más, o tarde para tener un buen físico, o para lo que sea.
Verdaderamente, lo que no tenemos son ganas. Qué motivo tan liso y llano y fácil de entender y hay que ver cómo distorsionamos el pensamiento, para justificar no sacarnos esas espinitas que muchos de nosotros llevamos clavadas. No tenemos ganas de estar días, semanas, meses, puede que años, quizás toda la vida, pagando el precio de lo bueno de verdad, que suele ser alto. Y lo digo aquí con la boca pequeña, porque sé que pocos sitios deben ser más inadecuados para afirmarlo que entre ustedes, la gran mayoría ejemplos poco paradigmáticos de esa actitud.
Concluyo con una anécdota deseando no haberles aburrido, cosa difícil:
Hace muchos años tuve la suerte de coincidir con un monitor de gimnasio muy culto, que me dio muy buenos consejos. Una vez, me contó que alguien recién inscrito le había preguntado cuánto tardaría en tener un cuerpo “de gimnasio”. Él había respondido que no menos de seis años. El otro dijo: «Seis años es mucho». A lo que él respondió: «Los seis años van a pasar igual. La diferencia es que si entrenas, cuando pasen, tendrás ese cuerpo».
Si me lo permiten: en el caso de que deseen algo realmente, empiecen hoy.
Saludos.
38 Me gusta
Pero es que no se puede estar en misa y repicando.
Las industrias europeas ganaron mucho mucho y mucho deslocalizando la fabricación para conseguir reducciones de costes, entre ellos los de trabajo y seguros sociales, que en Europa era mucho mas caro al tener coberturas sociales conseguidas a lo largo del siglo, mientras que en tercer mundo no, o cobras poco si trabajas y si te pones enfermo no cobras.
Incluso se justificaba hacerlo, diciendo que así se ayudaba al mundo a progresar y que se reincorporasen al mundo rico… Y así ha sido!! China se ha enriquecido claro.
Sí, Así ha sido, la clase media en china sube , pero de rebote la clase occidental baja, no fabricamos nada y ahora somos dependientes de tecnología, medicamentos( nos cuesta tener la farmacia bien surtida, porque mucha de la materia prima se fabrica fuera, en India y China) y productos hechos más baratos fuera.
Para poder fabricar aquí ahora y no ser dependientes , se quiere bajar el sistema de bienestar, y privatizar todo y sea bueno o sea malo, yo no tengo la capacidad de saberlo, llevará aparejado otras consecuencias que pueden ser peores
Una bandeja llena de agua si la balanceas, o desborda por un lado o desborda por el otro.
Mejorar resultados para los accionistas, despidiendo , como ha ocurrido con Grifols ahora ( se dispara en bolsa porque despide y mejora resultados) a mi me da la impresión que no es sostenible. Porque esos despedidos reducirán su consumo y aumentaran los gastos sociales, que por otro lado para que no se disparen se les ocurre recortarlos. y la acción Grifols sube de forma poco sostenible porque habrá un momento que no podrá despedir más y los despidos tendrán consecuencias sobre sus resultados posteriores
Ya digo, si se balancea en exceso para obtener beneficios excesivamente crecientes, las cosas se desbordan, ya sea por una parte del mundo o por otra.
Hemos balanceado demasiado y >Europa se está desbordando, social y económicamente Hablando
6 Me gusta
Saludos cordiales
¿Cómo le llamaban a ese tipo zafio, incorregible y… vivo durante cuyo mandato EE. UU. no entró en ninguna guerra y decía “America first”?
También insistió en que las empresas norteamericanas mantuvieran sus puestos de trabajo en EE. UU.
Me parece un poco ingenuo creer que las empresas se van a mover a donde diga el presidente de USA, sea el tipo “zafio” de antes, el tipo “senil” de ahora o cualquier otro. Las empresas privadas, es decir, el dinero, se mueve por razones económicas, no políticas y menos de nacionalismos usados para ganar elecciones (make America great again). Cuando yo era un crío y mirábamos nuestros aparatos siempre ponía Made in Japan, después empezó a poner Made in China y ahora incluso empezamos a ver Made in Vietnam. Lo que pondrá en el futuro no lo sabemos nadie. Y si lo supiéramos ya sabríamos dónde invertir.
9 Me gusta
Saludos cordiales, @Laertes.
Lo que quiero decir es que en EE. UU. sí se están (o estaban) dando cuenta de lo que apunta @Aprendizdebrujo:
En Europa… tenemos otros intereses…
A este respecto en particular, nos vendría bien tener litio…
A mí me da la impresión de que en Europa nos vamos a empobrecer, pero estaremos orgullosos y diremos que somos ecosostenibles, no pobres.
Lo que nos vemos a reír si la ciencia y la tecnología logran eliminar el exceso de CO₂ que llevamos emitiendo y ha causado el efecto invernadero…
También hidrógeno como combustible:
Por cierto:
6 Me gusta
Pues llegó el día, empecé poco a poco hará unos dos meses a ver como respondía el cuerpo. Primero al trote, series cortas, respuestas, sensaciones… Y ahora ya tres días a la semana con tres dinámicas diferentes. Sin superar la media hora de carrera y con series más rápidas y cortas. Hace 18 meses no habría dado un duro porque volvería a correr. En apenas dos meses y sólo uno un poco en serio y en el último entreno ya hice 5 km a 4´20´´ el km. Y la sensación es que hay un buen margen de mejora a poco que las lesiones respeten. Ahora habrá que compaginarlo con el entrenamiento de fuerza, pero eso ya para la nueva temporada en septiembre (ahora tocan dos semanas de descanso del entreno de fuerza).
Otro hito es poder haber completado una ruta de montaña (que hice a modo de prueba) sin ninguna dificultad. Tampoco es que fuera algo extremo, eran cumbres de poco más de 1000 metros, pero me resultó mucho más sencillo de lo que podía imaginar, así que me he apuntado al grupo de montaña de mi universidad para este curso.
Pues eso: fuerza, huevos y honor. Sin sacrificio no hay recompensa.
18 Me gusta
Muy buen progreso. La verdad es que el ejercicio es un verdadero milagro para la salud, junto con cuidar la alimentación y eliminar o reducir al mínimo el alcohol. A mi ahora lo que más me duele es la gente cercana que tiene unos hábitos horribles y muy perjudiciales para la salud, a fin de cuentas no muy diferentes de los que tenía yo hace unos pocos años, y no hay manera de animarles a cambiar. En cuanto les mencionas el tema se ponen a la defensiva o directamente se enfadan y no hay nada que hacer. ¿Han tenido ustedes éxito en animar a alguien a empezar a cuidarse?
11 Me gusta
El alcohol esta tan integrado en nuestra sociedad que ya no se puede decir nada malo de el. El que no bebe, automaticmente ya es un soso o un aburrido…
El aumento del estres entre gran en parte de la poblacion, mas el mantra de que “todo es más divertido con una copita”, ha convertido el alcohol en el metodo de autoayuda mas extendido hoy en dia… 
12 Me gusta
El tema del alcohol ya lo doy por perdido pero a mí me entristece mucho ver las cantidades ingentes que se toman en celebraciones o incluso en el día día. Y ya no solo por los efectos sobre la salud a largo plazo, de sobra conocidos, sino por ver cómo llega un momento en cualquiera de estas celebraciones en que se hace realmente imposible mantener una conversación coherente siendo el único que no bebe de toda la mesa.
11 Me gusta
Me he quitado últimamente todo lo que es alta graduación y estoy muy contento.
Eso sí , estos días de calor, mil nueve y unas bravas en una terraza cuando ya se ha ido el sol no lo perdono. Pero bueno, poco a poco.
8 Me gusta
Bien hecho. Es muy difícil cambiar de golpe, pero se puede ir dando pasitos en la dirección correcta y al final se llega sin darse cuenta.
5 Me gusta
Yo creo que con quitarse los pasteles y bollos industriales, la comida basura, los grandes atracones, el alcohol a diario y las borracheras los fines de semana y moverse un poco ya se está en el 1% mejor. No es demasiado complicado y se nota la mejora.
Luego todo lo que sea mejorar pues está genial pero no darse algún capricho de vez en cuando ya me es más complicao 
10 Me gusta
En temas de alcohol, quitándose de la parte de destilados ya tienes un mundo ganado. Entendiendo que no te vas a meter un par de botellas de vino al día claro. Pero vamos, que un buen vino con ciertas comidas es irremediable y seguro que tiene que ser bueno para la salud.
El tema de la comida basura vs comida en condiciones es bastante obvio. Yo lo que no entiendo aquí es la debilidad por la comida basura, cuando joder, comer en condiciones ya no es que sea más saludable, es que está mucho más bueno. Cuando uno es estudiante y no tiene un duro, pues toca lo que toca, pero joder, cuando uno ya tiene un trabajo y demás, debería ser la prioridad número 1 a la hora de desplegar dinero.
Y tampoco es tan caro ojo. Porque últimamente veo unos palos en la comida basura y comida para llevar que alucinas, que me quedo pensando joder, pero si me pillé el otro día un par de doradas frescas por menos de eso 
14 Me gusta
Es normal, al fin y al cabo uno también se define y se identifica a si mismo y sus semejantes por sus hábitos.
Si tus amigos son más de salir de copas que de echar un partidillo al día siguiente para sudar el alcohol, que te venga alguien a decir que lo que haces está mal, lo va a interpretar como un ataque personal.
En estos temas muchas veces no se tiene en cuenta el entorno de la persona a la que se quiere ayudar y creo que es un error, porque nuestro entorno contribuye a moldear nuestra identidad.
Cambiar entorno y hábitos supone que la persona va a transformar su identidad en mayor o menor grado y mucha gente cuando es consciente de ello, se acojona porque supone renunciar a cosas con las que se identifica profundamente.
12 Me gusta