En la última sesión del club del libro mencionamos el libro “The inner game of tennis”, de Robert Gallwey. Yo no lo he leído pero lo he visto recomendado en varias partes, como ésta:
Igual les resulta interesante para alguna futura sesión.
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Tiene muy buena pinta.
Tomamos nota.
De momento para la siguiente sesión ya tenemos libro:
Falta que @Dudweiser analice número de páginas, velocidad de lectura etc para poner una fecha aproximada.
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Me apunto este para el pipeline eterno 
Se habla de compañías como GE, Danaher, Caterpillar, Honeywell…
https://www.amazon.com/-/es/gp/aw/d/1260468399/ref=tmm_hrd_swatch_0?ie=UTF8&qid=1684011690&sr=1-1
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Teniendo en cuenta las métricas habituales nos sale primeras semanas de Julio, si apuramos podemos intentar hacerlo antes de las vacaciones a finales de Junio, aunque ya son fechas peligrosas.
¿Qué preferencia tienen?
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Vengo con propuesta para la próxima votación.
En la última sesión hablamos de la gente que tiene la suerte de trabajar en algo que le apasiona, e investigando un poco sobre el tema de la felicidad en el puesto de trabajo me han entrado bastantes ganas de leer “Happycracia”
Happycracia: Cómo la ciencia y la industria de la felicidad controlan nuestras vidas (Contextos) https://amzn.eu/d/fdYe975
Me llama principalmente la atención la parte sobre la Psicología Positiva y los intereses reales que puede haber tras los lobbies relacionados. Y como en el club somos de generaciones diversas, puede ser interesante comparar experiencias y opiniones.
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"Me gusta su propuesta @Dudweiser!
Personalmente he cambiado mi opinión con el tiempo en este tema. Antaño pensaba que esto de ser feliz en el trabajo era una idiotez, pero ahora mismo lo veo casi esencial.
A ver si encontramos un momento y recopilamos libros de este hilo para votar otra vez.
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Si hace una búsqueda de los libros que llevan la palabra felicidad (o algún sinónimo) en su título o subtítulo, se va a encontrar con la realidad del término.
Yo creo que en estos casos más que la industria cree un negocio para explotar la felicidad, lo que creo, es que la naturaleza de la condición humana nos lleva a un tipo de comportamiento muy predecible hacia el concepto de la felicidad.
Uno siente la necesidad de competir en ser más feliz que los demás, cuando mucho me temo que es de esas cosas donde no tiene sentido competir, aunque en muchas otras cosas si pueda tener sentido y casi ser imprescindible.
De hecho creo que los griegos con toda la variedad de visiones de la misma que tuvieron en forma de distintos pensadores que abordaron la cuestión, ya culminaron en casi la totalidad, los distintos enfoques del tema.
Incluso un pensador moderno tan original e inclasificable como Cioran, respecto al tema de la feliciad, no deja de ser una variante de los cínicos. Eso sí con el peso histórico de un montón de siglos que analizar y satirizar desde esa perspectiva.
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Al final es muy sabio recurrir a los clásicos en muchos ámbitos. La cocina popular, la música clásica, la filosofía de Grecia y Roma…
Nos encanta la novedad y reinventar la rueda. E indudablemente hay avances, pero a veces tengo la sensación de que muchas cosas se conocen desde hace muchísimo tiempo.
Quizás deberíamos proponer más clásicos para el club del libro. ¿Qué opinan?
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Hace unos días escuché esta interesante conferencia de Carlos García Gual, erudito helenista:
La búsqueda de la felicidad en la filosofía helenística
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Estando en gran parte de acuerdo con nuestro amigo Jordi, creo que ese conocimiento no es tan accesible como se pueda imaginar.
Sobre todo porque considero que la lectura directa de los clásicos es café para muy cafeteros. Y no me malinterpreten porque el nivel de comprensión lectora de este foro es superior a la media, pero muchas cosas han cambiado de hace 2500-2000 años a esta parte y no es solo cuestión de dar con una buena traducción (que cuesta) sino también de la manera de escribir.
Les recomiendo “El infinito en un junco” de Irene Vallejo (posiblemente el mejor ensayo en español que se haya publicado en lo que va de milenio) para que vean la evolución de la transmisión escrita. Aunque aparentemente no parezca tener relación, verán que los recursos eran muy limitados obligando a comprimir al máximo las ideas expuestas. Y esto es algo que, por muy acostumbrado que uno esté a Twitter, cuesta procesar. Porque Twitter obliga a resumir pero el mensaje ha de ser directo, mientras que los griegos más racionalistas te dan la semilla para que la verdad la saques de dentro, y eso requiere tiempo.
El tema de las traducciones además es complejo, en primero de filosofía se enseña sobre todo Griego porque se advierte que sin ir a la fuente original es muy difícil llegar a lo que se quiere transmitir. Hace poco nuestros amigos @Apolonio y @Luigi hablaban sobre las meditaciones de Marco Aurelio, libro interesantísimo que desgraciadamente mucha gente abandona por el esfuerzo que requiere al lector no acostumbrado a formatos como el suyo.
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Probablemente. Pero si alguien quiere un conocimiento profundo de esos temas, no le quedará otra que entrar a fondo en la cuestión.
Pasa un poco como en inversión. Que es fácil repetir ciertas frases pero la convicción real en ellas es algo más complicado que se suele ver cuando la situación se complica.
Como comentaba, si uno quiere interiorizar ciertas cuestiones, necesitará dedicarle ese tiempo.
Soy un fan de los aforismos. Que no dejan de ser un mensaje muy directo y condensado. Sin embargo nunca he tenido la sensación con ellos de la misma falta de profundidad que sin embargo si suelo tener en twitter.
Lo que diferencia unos de otros es probablemente el tiempo que ha dedicado a ellos quien lo ha escrito. El aforismo es breve pero el tiempo para escribirlo, al menos en aquellos maestros del mismo, suele ser bastante más largo. Y algunos de ellos te dan vueltas en la cabeza bastante.
En el caso de Twitter, también hay quien es algo estilo aforismo, pero por lo general suelen ser otro tipo de mensajes distintos que lo único que tienen en común con el aforismo es su brevedad. Lo demás está muy lejos de él.
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Estamos de acuerdo totalmente. Quizás parezca que no lo estamos tanto porque mi postura en este hilo está centrada en la elección de obras para el Club de lectura, donde es necesario un balance que no sature el compromiso de los lectores.
Respecto a la inversión nos pasa algo similar, de vez en cuando se propone Keynes, o algún clásico y es difícil acomodarlo la verdad.
Volviendo a los griegos, quizás el concepto de eudemonia sea muy interesante, pero parte del mismo Socrates del cual no nos llega obra directa. Siendo fieles a las fuentes podemos proponer leer “La República” de Platón, o ir a la obra de Aristoteles. Ambas me parecen exigentes y las traducciones pueden dejar qué desear.
Si el tema de las filosofías vitales interesa creo que es más accesible seguir la recomendación de @Apolonio y leer “How to Live a Good Life: A Guide to Choosing Your Personal Philosophy” que presenta por encima una serie de filosofías vitales centrándose mucho en el florecimiento (casi podríamos decir felicidad) del individuo dejando muchas fuentes para aquellos que quieran adentrarse en la madriguera.
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Ese libro es excelente y fácil de leer, con capítulos cortos e independientes sobre 15 filosofías de vida. Además, ya está también en nuestro idioma:
https://www.amazon.es/Elige-filosofía-vida-cristianismo-existencialismo/dp/8499888496
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Desconfien del habla “oscura”.
Hace ya muchos, muchos años, Mario Bunge dio un curso sobre filosofia de la ciencia en Laredo ( Cantabria), y recuerdo vivamente oirle decir que el filosofo que tiene las ideas claras es capaz de expresarlas claramente.
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Le agradezco su recomendación de Irene Vallejo. No lo conocía y me tiene maravillado. Gracias
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Ayer falleció Daniel Ellsberg 
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Gracias por la recomendación. Muy interesante ensayo.
Me atrevo a recomendarle, en una línea paralela, " El giro" de Stephen Greenblatt" https://www.amazon.es/El-giro-manuscrito-olvidado-contribuyó/dp/8498926815
El libro deja el vértigo que produce descubrir que nuestro mundo pudo haber sido bastante distinto del que conocemos, de no producirse una serie de hechos absolutamente casuales y azarosos. En suma, una forma más de reflejar que el azar es el primer agente de nuestra existencia.
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Directo a la lista de lecturas pendientes. Muchas gracias.
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Por aquí una remesa de ideas que hemos ido comentando
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El verano se termina, es hora de ir buscando gimnasio, curso de inglés, y la siguiente obra para el club del libro… ¿hacemos una encuesta?
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