Un cordial saludo, Josesthe.
Veo que somos de quinta parecida y, por quedarme algo de memoria, si recuerdo esos tiempos.
¿Qué hicimos? Pues para no contar batallitas del abuelito, se resume sencillamente en un “lo que pudimos hacer”, unos con más suerte que otros. De las técnicas que detalla, muchas de ellas las he compartido, bueno, los que me mantenían. Y otras muchas, como enviarnos al pueblo a toda la chiquillada porque era más barato, los abuelos de esa época se pesaban no por kilos ni arrobas, era por kilates, unas joyas. Todos enlatados en un 600 (un puro lujo) con una vaca llena de trastos que igualaba el volumen del vehículo.
Se que es asunto de psiquiatras, pero siempre que rememoro mi niñez, no recuerdo tiempos de haber sufrido especial escasez, aunque si permanentes comentarios de “lo muy caro que estaba todo y que difícil es vivir” con la coletilla de “no sé a dónde vamos a llegar”, lo que recuerdo es, casi siempre, en blanco y negro, nunca en color. Lo entrecomillado se sigue repitiendo hoy en día, es permanente.
Soy un tipo optimista, optimista, algo muy distinto a ser feliz, aunque también ayuda. Una vez puse una tontería en este foro relativa a que entendía, y lo sigo entendiendo, que para ser totalmente feliz y con carácter permanente es necesario ser profundamente idiota, es un requisito imprescindible, es desconocer absolutamente cómo funciona el mundo. Considere lo que han vivido cinco generaciones anteriores y verá que es auténticamente extraordinario pertenecer a una generación que, en este país, bien o mal, hasta el momento no hemos pasado una guerra, crucemos dedos.
De la inflación que señala …………………………… también en su día puse un ejemplo personal, la única vivienda que he tenido en propiedad y que de momento no me la han quitado mis numerosos acreedores, va para casi 35 años, la financié con una hipoteca al bonito tipo del 17%, con una inflación cuando la suscribí del 20% anual. Este tipo de interés “tan favorable” lo logré porque poseía idéntico importe en efectivo, que vinculé en una IPF al tipo “no tan favorable del 14%”. Lo crea o no, con la desgravación fiscal que existía en esa época, no la recuerdo bien pero era un autentico disparate que fue regularizado y limado en la siguiente década, los tipos aplicable a renta y otras zarandajas, salía lo pagado por lo cobrado más lo bonificado, le insisto, un disparate, favorable, pero un disparate. Además, y no lo digo por tramposo, Hacienda no era lo que es ahora, digamos que era mucho más flexible en sus comportamientos, por decir algo, unos pecadillos que ni me va a considerar San Pedro en su negativa a que entre en el cielo. Cuando bajaron los tipos a cobrar manteniendo el de pagar, cancelé ambas operaciones y me quedé con el ladrillo. Si descuenta la inflación, gastos, coste de oportunidad, ganar no he ganado mucho, y aunque por vivienda similares a la mía, en antigüedad, superficie, servicios y ubicación se piden autenticas barbaridades, aunque no tengo hecho los cálculos, me conformaría con que el dinero invertido en su día mantuviera similar equivalencia, esto de que con la vivienda a largo plazo se gana siempre no lo tengo del todo claro.
Como bien se ha explicado en este foro, señalo a Agenjordi porque insiste en ello, la inflación debe mirarse desde distintos puntos de vista, dando como ejemplo que mantener el dinero en cuenta al 0% con una inflación nula, es mucho mejor a que te abonen el 7% con una inflación del 10%. En estos últimos meses, el asunto es distinto. Habrá que aguantar, no queda otro remedio, intentar encontrar algo cuyo rendimiento la compense o minimice y, ya para estrellas de la inversión, que sectores la pueden contrarrestar y tener un comportamiento decente, por decencia entienda igualar la inflación o superarla en unos pocos puntos.
Como ve, tanto vayan las cosas bien como mal, la conclusión final es no dejar de leer este foro, si al final terminamos todos llorando siempre podemos montar un orfeón o tomarnos unas cervezas y contarnos las penas, eso sí, en el concreto caso de la llorera, no espere que page la cuenta.