Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice, @malagaga. Simplemente me gustaría añadir un comentario para complementar (creo que en la misma dirección general a la que Vd. apunta en el mensaje general) la siguiente frase:
Totalmente cierto. Me permito añadir, con el único ánimo de complementar la frase anterior, que en ese caso que Vd. comenta “sólo” puede perder el total invertido. Si adicionalmente se endeuda para comprar esas acciones, éstas podrán perder todo su valor y, además, seguirá debiendo lo que pidió prestado.
Si está pensando en ir aportando periódicamente una parte de su salario durante toda su vida laboral, IMHO, no tomaría ese riesgo adicional –ya tendrá tiempo de ir realizando nuevas aportaciones en los próximos meses–.
Me sumo a esa posición. Personalmente, en el único caso en que me plantearía tomar un préstamo para realizar una aportación extraordinaria sería después de una gran caída generalizada de los índices (no inferior al 30%), y sólo si supiera que puedo devolver el préstamo incluso en caso de pérdida del empleo –supongo que un funcionario podría obviar en parte este requisito– o de mi principal fuente de ingresos. Al fin y al cabo, nada garantiza que después de una caída del 30% no pueda venir otra de igual magnitud.
Pero, como he dicho, es lo que haría yo. No digo que no pueda salir bien la jugada en otras circunstancias, simplemente que personalmente no tomaría ese riesgo.