Mi proyecto personal: Un portfolio DGI para el día de mañana

Hoy que es domingo por la tarde y tengo un rato libre, tras leer un libro en que decía algo del orden: “¿Quieres ser escritor? Pues comienza por escribir 200 miserables palabras al día”, he decidido empezar a hacer algo que llevaba un cierto tiempo planteándome: ya que todavía no soy Patreon, intentaré devolver parte del valor que he recibido desde que me di de alta en el foro manteniendo a la comunidad actualizada sobre mi cartera.

Nada de lo que compartiré aquí son consejos financieros de ninguna clase, sino simplemente, una forma mediante la que intentaré compartir un “diario de inversión” con la comunidad de +D. A medida que vayan pasando los meses y tenga tiempo, iré analizando compañías y justificando el por qué de los movimientos que voy haciendo, de modo que el contenido aportado no se limite únicamente a las actualizaciones mensuales, sino que también haya análisis de compañías y pueda aportar un poco de valor “cualitativo”.

Por último, por mi formación jurídica no he recibido más que formación MUY básica en finanzas, por lo que verán que mi forma de valorar compañías adolecerá a veces de fundamentos, ya que todo lo que sé, casi, lo he aprendido por mi cuenta, libro en mano, y haciendo números en un DIN-A4, cuando no viendo videos en Youtube de canales serios o haciendo preguntas en Quora. Imagino que gracias a este hilo, los que saben de valoración, podrán aclarar conceptos, corregirme, o incluso señalar nuevas fuentes en las que seguir formándome.

Vamos allá:

Como primera entrega, creo que lo más relevante es explicar de quién es esta cartera y qué pretendo de ella. La persona con quien he podido hablar que más me ha enseñado sobre bolsa me repetía siempre lo mismo: “see the end from the beginning”, y creo que no se entenderá la cartera si no va precedida de una explicación sobre quién es su titular y qué pretende con la misma.

En cuanto a mí, comencé a invertir seriamente en bolsa con 27 años, tal y como he referido en otras entradas, tras leerme “Simple Wealth, Inevitable Wealth” de Nick Murray. Tras eso, vino “El inversor inteligente”, y tras eso, “What works in Wall Street”. Entre medio ha habido multitud más de libros de inversión y de temática inversora, pero estos tres siguen siendo los pilares fundamentales. Está pendiente un libro de valoración, probablemente el de Damodaran, aunque sigo con la lista de libros de Fundsmith. A día de hoy, cuento 31 años, y aún tras pasar cuatro años invirtiendo sigo pensando y sintiéndome en pañales, de modo que esto del “largo plazo” es algo que creo que llevo bastante imbricado.

Pues bien, tras pasarme dos años enteros capitalizando fondos de inversión, decidí lanzarme a invertir en acciones individuales y seguir manteniendo aportaciones a fondos, por lo que en febrero de 2023, comencé con las aportaciones regulares a esta cartera, mientras que las aportaciones a los fondos han quedado como una contribución mensual repartida entre dos fondos: CT US Smaller Companies y Seilern World Growth. La otra posición es un indexado MSCI World que está un 30% en positivo.

En cuanto a la cartera de acciones individuales, la posición más antigua es Microsoft, a un valor medio de compra de $180; la más reciente es MCD, con un valor medio de compra de $255.

Lo que pretendo con esta cartera no es otra cosa que crearme un patrimonio del que poder vivir para el día en que deje de poder ganarme la vida trabajando. La idea es que el dinero que entra en mi cartera no sale del mismo ni tan siquiera por emergencias, por cumplir con aquello que dijo Munger: “lo más díficil del interés compuesto es no interrumpirlo absurdamente”.

A fin de cumplir mi objetivo, me he decidido por mantener una cartera bastante concentrada, mi intención es que esta cartera no llegue a pasar de las 15 acciones, y por el caso que pasara, nunca superaría las 20.

En cuanto a estilo inversor, me centro en empresas que puedo entender de forma más o menos sencilla, y a ser posible, negocios en que yo mismo pueda comprobar cómo van y cómo andan. Tal y como puede verse, tengo cierta predilección por empresas que estén dentro del sector de las “consumer staples”, pues me parece de los sectores más sencillos de entender. Esta cartera siempre tendrá como objetivo incorporar compañías que cumplan uno de los requisitos iniciales que tenía Terry Smith al lanzar Fundsmith: “small ticket, non-negotiable, non-durable”. A la vez, tengo predilección por compañías que tengan capacidad de aumentar sus dividendos de forma creciente en el tiempo.

En cuanto al turnover, mi política está en no vender ninguna de las empresas que incorporo. Pfizer fue comprada a 34 euros en febrero del año 2021 y he aguantado todo el tirón hacia arriba y todo el tirón hacia abajo. Creo que antes de vender abogaría por capitalizar otras empresas y dejar las que quiero vender como insignificantes, pero todo esto tendrá que ir viéndose. Tengo un checklist de venta elaborado, sobre el que haré un disclose en alguna entrada posterior. Los dividendos siempre se reinvierten, pero no necesariamente en la acción que los ha generado. Por ahora no tengo reserva de cash por si hay alguna bajada significativa.

Por último, en cuanto a composición de cartera, no tengo límite para invertir en una acción determinada. Esto significa que al no verme afectado por el límite legal de 10% máximo en una posición, puede ser que llegue el momento en que una acción pese más de un 40% de la cartera sin que esto “me preocupe”.

Habiendo examinado todo esto, cierro el principio de este hilo señalando los pesos de cada acción:

HSY - 18,17%
PFE - 13,56%
ITX - 12,73%
MSFT - 10,91%
MCD - 7,63%
PM - 7,01%
DGE - 6,88%
SBUX - 6,75%
CSX - 5,48%
HEN - 4,33%
ROL - 2,70%
VICI - 2,33%
NESN - 1,74%

Gracias a todos!

40 Me gusta

Que no le interesa el timing lo demuestra abriendo el hilo un domingo de verano, y no uno cualquiera, sino en el que Alcaráz acaba de ganar Wimbledon y España juega dentro de un ratito la final de la copa de Europa (le escribo desde un apartamento donde se ve una playa casi desierta).

Aparte de este chascarrillo, mi historia inversora es parecida a la suya, yo también empezé hace unos cinco años con fondos y hace unos cuatro con acciones, y también me inclino por las de dividendo creciente, aunque tengo de todo (no me pongo límite en el número de empresas).

Una cosa que sí nos diferencia más es la edad, ¡casi se la doblo! :frowning:

No pretendo darle consejos, no podría porque no me considero con los conocimientos suficientes, sólo un comentario de algo que yo haría de forma diferente en cuanto a la “no venta” de activos, y es que estoy de acuerdo pero sólo en parte: considero que no hay que tratar igual las emrpesas cíclicas que las que no dependen tanto del ciclo, por lo que yo en las cíclicas no tengo tantos miramientos para vender si considero que están empezando a entrar en su parte “mala” del clico.

Saludos y le animo en su proyecto

18 Me gusta

Saludos cordiales.

¡Oh! Esto debe cambiar. Cuesta poco tiempo y poco dinero. Le recomiendo la lectura de este mensaje: Cómo ser Patreon, el reconocimiento a una gran labor. Una gran inversión a L/P .

En especial:

10 Me gusta

Me parece un sistema de inversión excelente. Parece usted muy conservador, paciente, prudente y además una persona que conoce sus limitaciones. Le auguro un buen desenlace.

Sólo una cuestión y es saber el motivo por el que nunca vende. Es decir, en el infinito ninguna empresa sobrevivirá. Por ello, si tras su análisis ha decidido incorporar a su cartera una acción, la lógica dice que tras ese mismo análisis en el futuro y cuando dicha empresa haya cumplido sus expectativas debería ser vendida.

10 Me gusta

Actualizo con las compras correspondientes a finales de julio.

Vaya por delante que no pillé bien el mercado bajista de los últimos…tres días…a pesar que solo tuve un día de caídas significativas en mi cartera de acciones individuales; la cartera de fondos se ha pegado una buena toña que creo que tardará un poco más en recuperarse.

En cualquier caso, la foto es esta:

Hoy parece que es un día feliz que contrarresta los días malos de esta semana. No obstante, he tenido muy poca beta: mi portfolio ha caído un 1,78% desde máximos, así que dentro de lo que cabe, puedo decir que este último mercado “bajista” ha afectado poco a aquello que llevo más: staples.

En cuanto a las compras, este mes he ampliado en:

  • SBUX
  • DGE
  • PFE

Comenzando por la primera, mi precio objetivo para entrar en SBUX son $75, y suelo comprar siempre por debajo de este precio. A la acción solo le veo un riesgo, que es lo que se le llama el “dead by a thousand cuts” que representa el crecimiento de las tiendas de café artesanal. A cualquiera recomiendo escuchar el podcast entero de Acquired con el fundador de SBUX:

Starbucks (with Howard Schultz): The Complete History and Strategy (acquired.fm)

Con esto uno puede hacerse a la idea de dónde viene Starbucks, qué idea tenía su fundador en la cabeza y qué riesgos presenta a día de hoy la empresa. Creo que en EEUU SBUX está perdiendo la “sensorialidad” del café para pasar a un sistema de café más expendedor con la app que te trae el café allí donde estés. Cambian los consumidores, es cierto, y también los hábitos; aunque creo que es bueno que SBUX haga que sus clientes quieran volver a los locales más que hacerse un pick-up coffee.
En cuanto a los fundamentales, es una empresa que actualmente no tiene cash suficiente, ni cash flow suficiente, para recomprar acciones sin incurrir en deuda.

A continuación, algunos números: tiene unos 6 billones de cash from operations, y un capex de 3 billones, lo que da un total de FCF de 3 billones para una compañía de 86 billones, o lo que es lo mismo, un FCF Yield (FCF/Market Cap) de A ello hay que restar dividendos, lo que da un total de 3,48% teniendo en cuenta que el FCF Yield del S&P500 según ycharts para este mes es de 1,32%; lo que implica que tiene un FCF Yield superior en 2,63 veces el del índice S&P500.
Los dividendos son 2,4 billions, lo que deja solo 600 millones de cash para recompras, lo que es insuficiente como para hacer diferencia y hay que tener en cuenta que la empresa tiene una obligación de $1,250 millones para el año próximo, teniendo en cuenta que los $1,250 que había para el año corriente ya han sido pagados:

Por lo tanto, la situación de la compañía es algo delicada en lo que a fundamentales refiere, pues si bien el dividendo y los pagos deuda son seguros, ahora que la acción está más barata en comparación con su media histórica sería bueno que la empresa hiciera recompras para aumentar el EPS.

En lo que refiere a las previsiones, no planean crecer este año 2024, y la gran cuestión que tenemos que plantearnos es si logrará llegar a ese 10% de crecimiento estimado para 2025, que honestamente, no lo creo. A ello hay que sumarle que la empresa ha tenido un dividend growth rate (según SeekingAlpha) de 16,30% en los últimos 10 años, lo que encaja mucho en una cartera de DGI como la mía, a pesar que ahora mismo la compañía no pasa por su mejor momento empresarial.

Por tanto, la apuesta por SBUX es más a futuro, partiendo de que la empresa está en un momento en que su valoración respecto a la media histórica es baja y que o bien el actual CEO, o bien uno que le sustituya, sean capaz de devolver a la empresa ese toque que le imprimió el fundador. Ahí radica la esencia de mi tesis. Howard Schultz ha sido quien ha llevado a SBUX a donde está, y ahora hay que encontrar a alguien que imprima a su trabajo la misma pasión por el café que tenía Schultz. No será fácil: es el reto a medio y largo plazo que tiene esta compañía. Podemos decir que está en una situación como la que Terry Smith usó para describir a Unilever dos años atrás: “me gusta la empresa y sus marcas, no me gusta la dirección”. Similar caso, en mi opinión.

Eso no obstante, los demás fundamentales de la empresa son buenos, y creo que está en un momento en que la acumulación, con la paciencia, darán sus frutos. Esta es una parte de mi tesis sobre la empresa, el resto la iré publicando paulatinamente, con más números.

En lo que refiere a las demás compras, suelo comprar un poco de PFE cada mes aprovechando que está por debajo de los 34 euros, mientras que compré DIAGEO aprovechando la bajada que ha pegado (y aún lástima porque hoy está a precio todavía más de derribo). Creo que el mercado sobrerreacciona a sus profit warnings y ya descuenta un precio como si la gente ya no fuera a beber nunca más alcohol. Creo que pocos momentos son mejores que el actual para comprar una empresa que comercializa productos con publicidad restringida, altas barreras de entrada y que, no nos engañemos, son productos adictivos. Hoy no haré entrada en profundidad sobre DIAGEO, solo diré que cualquiera que mire en Google Finance la cotización histórica de la misma verá como es una empresa cíclica de manual, y que DEO ya ha pasado por estos ciclos de ups and downs y, más que menos, la gente sigue bebiendo Baileys.

Hasta aquí la actualización de este mes; el mes que viene terminaré la tesis de SBUX y hablaré sobre aquello que compre a las puertas de setiembre; ahora mismo hay bastante cosa en el radar.

Seguimos,

23 Me gusta

Han contratado al Rockstar de la comida basura.

Parece que una se dispara y la otra se hunde.

10 Me gusta

Tanto como hundirse…
Jeje

A ver qué hace Akman con ella.

9 Me gusta

Caía un 12 o así a primera hora y ha cerrado bajando un 7 y medio (como en las cartas :rofl:). Luego en el año sigue siendo de las que mas sube del sector.

Más allá de analisis técnicos chusqueros, la sigo viendo súper cara :rofl:.

11 Me gusta

Parece que en el ultimo reporte del primer semestre ya había soltado un 10% de la posición. Veremos a ver porque al final utiliza mucho opciones y esas no se ven en los informes de dataroma.

Yo estuve tentado de pegarle un bocado pero me quedé quieto…

3 Me gusta

Es asombroso que en una empresa de unos 100B (o casi), el simple hecho de quitar al tipo en la cúspide de la pirámide signifique que la empresa vale un 25% más. Así como así. Yo soy bastante escéptico en esto de los CEOs “rockstar” y que ellos solos van a cambiar una empresa por completo, aparte de que cada caso es un mundo y Starbucks 2024 no es la Chipotle 2018.

Dicho lo cual, como accionista me parece genial lo de largar a Narasimhan. Esta durando poco el hombre, en Reckitt tampoco duró mucho en su primera etapa como CEO.

El caso es que lo que ayer cotizaba a 20x o algo menos, ahora se ha ido a 25x. Que con la caída desde el pico, quizás se nos nubla la vista y nos creemos que esto esta peor de lo que esta, y estaba cotizando a 20x antes del subidón.

12 Me gusta

Está para soltarla a esa valoración, sí. Acaba de darte el retorno esperado de 4 años en un día jeje.

7 Me gusta

No suelto nada, al menos por ahora. Son acciones compradas hace ya más de un lustro, es decir, la plusvalía latente es importante, y bueno, las he llegado a tener a más de 30x y aquí siguen, aunque también eran otros momentos de construcción de cartera. Y la empresa en si, y la marca que tienen, me gusta bastante. Quizás si que me lo podría llegar a plantear si se vuelve a ir a la zona de 105-110 que se vaya otra vez a > 30x, ya que veo otras cosas que me gustan más.

Peeero, este año ya me he limpiado casi toda la parte de semiconductores de la cartera, es decir, plusvalías ingentes y sabrosas, y la verdad es que apenas tengo este año minusvalías para compensar, y las pocas que veo no quiero venderlas ni son grandes, así que tampoco quiero incrementar más todavía la factura fiscal 2024 en cosas que no están a un precio muy loco.

10 Me gusta

Ahora que por fin encuentro un momento, deseo hacer una pequeña actualización del blog. Si bien me comprometí inicialmente a escribir como mínimo mensualmente, cubrir el viaje de bodas de un compañero y un pico de trabajo me han tenido llegando tarde a casa y con muy poco sosiego para sentarme a escribir algo sesudo en estas páginas.

Debo comenzar señalando que parte de los múltiples comentarios relativos a mi intención inicial de no vender las posiciones de mi cartera me hicieron recapacitar, por lo que eliminé dos posiciones de mi cartera. Creo que lo importante es el razonamiento detrás de la venta, así que comenzaré por esto, después por las compras, y finalmente daré una opinión sobre mi cartera en la actualidad.

Las ventas fueron las siguientes:

  1. Henkel: Henkel es una empresa que compré bajo dos premisas claras: la primera, era una empresa europea que pensé que estaba barata cuando la compré a 63€. Mi tesis era triple: era un negocio con un payout bajo, europeo en un momento en que la bolsa americana estaba muy cara, y que había tenido un BPA de casi el doble que en el momento que la compré. Es decir: esperaba el turnaround mientras me iba pagando un dividendo que, por la bajada de precio, no estaba nada mal en comparación con el histórico. Esta era la tesis mía, y la vi reafirmada en el hecho que uno de mis fondos favoritos, Guinness Global Equity Income, también la llevaba en cartera; en cierto modo, era una posición “adhesiva” (nunca mejor dicho) a la tesis de Guinness. La vendí por un poco más del 10% de beneficios sin incluir dividendos cuando vi que dicha gestora la había eliminado de su fondo. Les dejo la explicación del fondo justificando tal movimiento:

  1. VICI: Vici era una posición que había abierto porque quería tener una cierta exposición al mercado de REITS americanos en un momento en que los tipos de interés estaban muy bajos. Sin embargo, era una posición muy residual de mi cartera y tampoco invertí en ella con mucha convicción. La vendí con poco beneficio, casi un 10%, básicamente porque no tenía convicción en ella debido a que los REITS no entran dentro del todo dentro de mi “universo de inversión” debido a su alto coste en capital - algo que entiendo que haya foreros que me discutan porque y, ya que sacaba la podadora a pasear, al menos sacar aquello en lo que no tenía convicción.

Y dicho todo esto, vamos a la acción: las compras.

No es ninguna coña: en los meses de septiembre, octubre y noviembre, he comprado las siguientes empresas:

  1. Pfizer
  2. Hershey
  3. Nestlé
  4. Rollins
  5. Pepsi

Cualquiera que siga el devenir del mercado se pensará que o tengo muy mal ojo para elegir acciones o que le estoy vacilando, pero es lo que he comprado y creo que es positivo exponer qué me llevó a ver oportunidades en estos negocios:

  1. Pfizer: hice una compra fuerte el día antes que la compañía anunciara resultados, y la verdad es que se produjo una situación de Mr. Market de manual en que no entendí cómo era posible que con los buenos resultados que habían anunciado la acción bajara:

texto en negrita

Y lo mejor, es que subieron guidance:

Estoy de acuerdo que tuvieron “non recurring items” por valor de $0,30 y que esto no gustó al mercado, pero a día de hoy, en el caso que cumplan la previsión más pesimista, es decir: EPS $2,75 por acción, la acción nos da un yield del 10,95% por acción, con un dividendo sostenible del 6,69%. Puedo estar de acuerdo que Robert F. Kennedy como Secretario de Salud plantea un escenario incierto para el sector de vacunas, pero Pfizer actualmente tiene un desarrollo de producto no únicamente centrado en vacunas; es más, se está centrando actualmente en incrementar sus productos oncológicos. Creo que lo que más incertidumbre genera es cómo Albert Boula va a integrar Seagen en PFE, teniendo en cuenta que este tipo de integraciones comportan mucho riesgo. Es, para mí, la apuesta que es PFE. Puede salir bien o puede salir mal, por eso la acción cotiza a precio de derribo. No obstante, creo que desde un punto únicamente quantitativo, no hay casi nada más barato en el SP500 que esta acción.

  1. Hershey: mi mayor posición. Creo que ha recibido mucha condena por el precio del cacao, que va a tardar años en reponerse a niveles históricos. En consecuencia, antes de entrar a mirar los financials de la compañía, lo que hay que mirar es el nivel de precipitación en Costa de Marfil -primer productor mundial de cacao-, para ver qué perspectivas ofrece el futuro de su materia prima:

Como puede apreciarse, 2022 fue un año muy malo que hizo que bajara la producción de cacao debido a una sequía que corrigió parcialmente en 2023 y que ha corregido en 2024. La única cuestión está en que los productos como el cacao se compran mediante derivados, y que el precio a que se ha pagado el cacao durante este año para los próximos va a seguir golpeando a Hershey. En consecuencia, la empresa se ha puesto las pilas abriendo nuevos productos. Sigo pensando que Hershey es el caso claro de “empresa de calidad que pasa por problemas temporales y que cotiza muy por debajo de su media histórica que cuando llegó a máximos de $274 la acción todo el mundo la veía inalcanzable y que a $170 ya no es tan de calidad”. Por encima de todo, hay una apuesta que tengo bastante segura, que es que en EEUU se seguirán consumiendo chuches y chocolate. Además, el Q4 es la temporada alta de Hershey (Halloween y Navidad), por lo que creo que el próximo Q4 dará mejores noticias. Si alguno quiere conocer la empresa de un modo más ameno, por aquí le dejo este podcast en castellano:

  1. Nestle: Nestlé está en mi cartera porque uso IB y la tengo en su moneda original: Francos Suizos. A pesar que me cobran casi 5€ de comisiones por compra, considero que es una empresa que vale la pena porque me permite diversificar en divisa mientras compro algo que sigo pensando que es de calidad. Comienzo señalando que es una empresa que pasa el filtro de Guinness, también la llevan en su fondo de Global Equity Income, y es una empresa que también llevó Terry Smith en su día. También la llevó Emérito Quintana, aunque hoy sea abiertamente crítico con su management. Hay cosas que no me gustaron, como que mantuvieran un guidance de subida del 4% en un entorno muy desfavorable, y que lo tengan que bajar al 2% y se perciba como una mala noticia. Yo hubiera sido más comedido viendo el entorno desfavorable y el efecto divisa. No obstante, Nestlé tiene para mí tres aspectos importantes que deben ser muy tenidos en cuenta: es una de las tres grandes chocolateras retail (Hershey, Lindt y Nestlé) -excluyo Barry Callebaut porque su negocio es muy diferente-, y el primer productor alimentario mundial con exposición verdaderamente global. Sigo pensando que la humanidad consumirá chocolate el año próximo, en 5 años y en 50. En segundo lugar, tiene muchísima fuerza en el segmento del café: Nestlé, Nescafé, Dolce Gusto, Nespresso y Starbucks. Cuando uno va a cualquier estantería de cualquier supermercado, hay un casi monopolio de Nestlé con la excepción de L’OR -JDE-. El café sigue manteniendo muy buenos números y sigue haciendo crecer a Nestlé. Sigue siendo un gran filón. Y por último, Nestlé ha conseguido un turnaround en el segmento Nestle Health Science -se venden Meritenes ya hechos -, y tiene una exposición privilegiadísima en un segmento que otorgará mucho crecimiento en los próximos años, que es el sector pet food -mascotas-. Por todo ello, creo que está sobrecastigada por venir de una valoración excesiva, a la que se le suma un mal comportamiento de las consumer staples en general a lo largo de este año. Vuelve a sonar la narrativa “se ha demostrado que ciertas empresas que se consideraban calidad no eran tanta calidad”, algo que debe recordarnos a una carta de Warren Buffet cuando dijo que las acciones de Berkshire habían caído un 50% en cuatro ocasiones, y que era algo que podía volver a ocurrir. Creo que el cambio de management y su posición de predominio dentro del sector alimentario van a conseguir darle la vuelta a una cotización, a mi entender, demasiado castigada.

  2. Rollins: Es una de mis empresas favoritas porque considero que pocas cosas son más resilientes que Rollins. Tenía cash disponible el día que presentó resultados y cayó cerca de un 7% con unos resultados que en mi opinión eran buenos. Creo que en US se está normalizando que tener un resultado dentro de lo esperado es negativo, y cayó la cotización -para mí, inexplicablemente-. En menos de un mes ha recuperado su nivel, y llegó a crecer un poco más de un 10% desde el desplome tras resultados. Amplié en el turnaround y me salió bien. Al final, creo que nadie quiere vivir entre cucarachas, y nada es más efectivo contra ellas que Rollins. Dejo aquí otro podcast para quien quiera saber más sobre esta curiosa empresa:

  1. Pepsi: Sigo desde hace tiempo un canal de YouTube llamado “Patient Investor” y suele considerar que Pepsi por debajo de $165 es una muy buena compra. Ya que hoy me he extendido bastante, haré la próxima entrada sobre la compañía, ya que es una nueva incorporación, expondré toda la tesis que tengo respecto a la misma. Añadiré únicamente que dos inversores a los que sigo, Terry Smith y el Yacktman US Equity Fund de Jason Subotky llevan esta empresa. Ahora que se ha puesto a tiro, yo también la llevo.

En cuanto a comentario general sobre la cartera, únicamente puedo decir que he podido sufrir la frustración de sentir que el razonamiento apriorísticamente lógico no se ha visto reflejado en la cotización. Es en estos momentos en los que uno se ve sometido a prueba, ya que cuesta ahorrar e invertir para ver cómo la contribución mensual se desvanece en tres días. Aportar en caídas es bonito al principio, pero no lo es tanto cuando uno se ve obligado a seguir aportando en posiciones que llevan mucho tiempo cayendo pero en la que los números dicen que siguen siendo la opción más inteligente. Eso se hace más doloroso cuando uno ve que a día de hoy muchas compras en tecnología han resultado ser magníficas apuestas, por lo que me viene muy a menudo a la mente una de las primeras entrevistas de Warren Buffet: “para invertir necesitas una personalidad estable, que no tenga un gran placer por ir a favor o en contra del resto de inversores”. Siendo de los que tuvo PFE en máximos históricos y la ha visto caer, puedo aseverar que no es fácil tener este tipo de cualidad, sin perjuicio que no me planteo vender en tanto en cuanto no toquen el dividendo.

Así, puedo decir que Inditex, PM, MCD y SBUX me han salvado el año y han aguantado un descalabro tremendo de mis principales posiciones. De ello extraigo una conclusión curiosa: puedes tener una cartera diversificada con 13 posiciones. Y sin perjuicio del descalabro, pienso que tras la poda de empresas mi cartera ha ganado aún más en calidad. Seilern World Growth lleva -1,58% a tres años, y yo voy un 6,22% positivo en el año excluyendo dividendos, que con el portfolio rondando el 4% de dividend yield no está mal. Son momentos agridulces, la verdad, pero veo que cumplo mi principal cometido: no perder dinero en bolsa.

Y para cerrar y haber tratado todos los descalabros, terminaré hablando de Diageo.

Con respecto a Diageo, debo decir que el hecho que Terry Smith la vendiera fue algo que me dio que pensar, pero creo que es más el “escarmiento” tras no haber atinado con EL y Paypal que un convencimiento en la venta. La gestora Guinness la sigue llevando en cartera, y doy por reproducido lo que manifiestan en su carta de noviembre:

Aquí dejo el estado de la cartera a día de hoy:

34 Me gusta

Voy con la primera actualización del año, que esta vez será más bien psicológica, ya que a medida que pasa el tiempo uno va entendiendo aquella frase de Damodaran “valuation is easy, life is hard”.

Tengo el portfolio en rojo desde la última bajada sustancial de Hershey en las últimas semanas, lo que ha hecho que ponga en valor y reflexione sobre aquella frase de Buffet “[to invest] you need a stable personality: be someone that neither derives great pleasure or pain to be with the crowd or against the crowd”.

Bien, pues en seguir trabajando esa “stable personality” me encuentro ahora: mi primera posición ha pegado una gran bajada y en breve ya no tendré fuerza económica para ir corrigiendo las caídas con más compras (DCA puro) y conseguir poner el marcador de nuevo a cero. Tengo el portfolio todavía en positivo, pero las caídas sustanciales de PFE y HSY han sido un buen tiro en la línea de flotación de mi cartera. Tampoco ha ayudado la caída de Nestlé, y Diageo; con lo que con cuatro acciones en rojo, uno se enfrenta a su propio demonio y se hace la clásica pregunta: “Oye, JTinvestor”, ¿tú crees que esto de invertir tu dinero de este modo es lo tuyo?".

Ahí es donde aparece de repente el “malo” de la película y ello hace que todo a tu alrededor comience a girar en torno a una palabra que para mí es peor que la que todo el mundo teme, que es “miedo”, aunque a lo que creo que hay que temer de verdad es a la palabra “alternativa”.
Ahí es donde creo que está la perdición del inversor: tratar de corregir tu cartera con alternativas que te quiten de la zona de dolor (pérdidas).
Es cierto que se necesitan subidas de un 100% para superar una pérdida del 50%, y aunque estoy muy lejos de ese escenario, ver que tienes a todo el mundo por delante mientras tú sigues por detrás te pone en la tesitura a la que llevo enfrentándome unos cuantos días, que es:

“¿Cómo es posible, si has comprado tanta “calidad” que tengas tantos rojos en cartera?”.

Eso hace que en estos momentos sea más duro seguir invirtiendo cada mes en hacer crecer el portfolio, y en mi modesta opinión, un momento como el presente, es cuando cualquier inversor es más susceptible de caer en alternativas que dañen su proceso inversor.

En este contexto, creo que uno debe volver a la base del razonamiento y pensar en qué le movió a iniciar el camino en que está, y en mi caso no era otra cosa que tener una cartera de dividendos crecientes para el día en que me retire, que preveo entre 33 y 40 años. En este sentido, una caída ahora no me es tan grave como me podría ser en otro momento de mi arco vital. La cartera no es tampoco tan grande como para que una aportación mensual contribuya a “eliminar” pérdidas, con lo que todavía hay margen para seguir siendo optimista. No obstante, esta situación me permite entender por qué hay más de uno que no recomienda la inversión directa en acciones para particulares, pues te pone en un carrusel emocional para el que considero que se necesita un temple bastante fuera de lo común.

Ahí puedo decir, sin tapujos: “invertir en bolsa es muy chungo”, porque pocas cosas creo que frustran más (y estoy bastante curado respecto a las frustraciones) que ver que has hecho un excel serio, conoces la realidad de una empresa, compras acciones a un precio que entiendes adecuado y aún y así te llevas un -20% en un contexto muy alcista para el resto de acciones. Cuando esto te ocurre con tres acciones de “calidad”, como son Hershey, Nestlé y Diageo, por este orden, uno empieza a tener sudores fríos y a pensar en buscar alguna alternativa a esta gran injusticia: comprar calidad a buen precio y que siga bajando; y creo que al caer en esa tentación uno cava, completamente, su propia tumba.

El primer ejemplo de tentación reciente ha sido comprar algo que no entiendo, como es Thermo Fisher. Por mi trabajo (abogado) no puedo saber para nada qué hace que lo que venden tenga una ventaja competitiva respecto a sus competidores. La vi a 500 y ahora ya roza los 550; ni entré entonces ni entraría hoy a pesar de estar tentado porque es una “acción de calidad”; mi único problema es que no tengo ni la más remota idea de qué determina que sus productos sean de calidad. Ser capaz de decir ahí: “fine, pass me”, es díficil.

El segundo ejemplo de tentación es volver a aquello que mejor me ha funcionado: la indexación. Todavía ninguna acción individual supera lo que tengo en mi Fondo MSCI World, y con el carrerón que lleva (invertí bastante a lo largo de todo el 2022) estoy muy contento con el rendimiento. Esto me recuerda a una frase de @MAA que leí hace ya tiempo y que tengo muy grabada: “si me hubiera indexado todo este tiempo me hubiera ido mejor”, pero trato de no caer en lo de volver a capitalizar el fondo indexado porque mi idea era armar un portfolio DGI y hoy ya tengo eso, y a cualquiera que le den mi cartera y le digan: “no lo toques en 10 años” difícilmente le darán un regalo envenenado o algo que se demuestre ruinoso con el paso del tiempo.

El tercer ejemplo de tentación es la que todo el mundo te cita como la primera amenaza y creo que no es tal: “vende”. Creo que es mucho peor comprar algo que uno no entiende pero que sube que vender algo que entiende y que baja (y eso que no comencé como fan de vender), aunque creo que salir de VICI fue una gran decisión, y salir de Henkel para fortalecer Nestlé no lo fue. Hubiera podido vender PFE a $60 y comprar MSFT con eso y hubiera sido un movimiento maestro, y eso no fue tanto un error como un fallo de no tener bola de cristal (creo que uno debe ser muy honesto consigo mismo al hacer backtest) como también hubiera podido comprar BRK.b desde el primer día que me metí en esto y hoy estaría mejor. Todo son opciones válidas y creo que estos escenarios son los que obligan al inversor a sentarse con sus demonios y a examinar si su razonamiento era lógico cuando se tomó. En mi caso, no he hecho nada ilógico ni nada que no estuviera alineado con mi objeto último de cartera, por lo que eso me ha ayudado a no desprenderme de posiciones perdedoras. PFE es la única posición que me produce más dudas porque mis fuentes ya no están en el sector, pero sigo pensando que en EEUU la gente seguirá comprando -y consumiendo chocolate-, y veo de primera mano que Nestlé no baja en innovación y en nuevos productos.

La cuarta tentación para mí ya es la más remota y la que creo que es a la que todo el mundo sucumbe “antes de morir”: explorar otros horizontes. No he invertido en Bitcoin ni en oro ni en pisos; aunque cada vez más me estoy formando sobre la inversión en estos últimos; y el oro me empieza a despertar la curiosidad. Si nunca invierto en ladrillo, será una vez tenga una cartera 10 veces igual a mi cartera actual, y con la finalidad de diversificar riesgo patrimonial. Con ello quiero decir que tentaciones del orden “vendo todo y lo meto a Bitcoin porque en dos años valdrá un millón de pavos” son las que entierran al 99% de inversores. Igual que invertir en un sector sobre el que no entiendes nada, como en mi caso es invertir en biotecnológicas. Ejemplo: en menos de 2 meses hemos visto a Novo Nordisk barrer de un plumazo la mitad de su cotización, yo no aguantaría algo así. Y repito el mantra “NVO es una acción de calidad”.

Por otro lado, no todo son penas y en el lado de los vencedores, SBUX es la posición que más beneficios me ha reportado seguida de PM (cada vez veo más IQOS por la calle) y me arrepiento de no haber comprado Altria, aunque PM con su yield on cost no es para quejarse. El MCD de al lado de mi casa sigue lleno cada día que regreso a casa por la noche y sigo pensando que nadie quiere vivir entre cucarachas, con lo que Rollins sigue manteniéndose con algo más de un 5% in the green.

No sé qué será de este 2025, aunque espero que Pepsi siga a su precio actual cuando me llegue la paga de enero para poder seguir ampliando y construyendo un fundamento ahora que la compañía parece que ha bajado del múltiplo al que nos tiene acostumbrados desde hace años.

En cuanto a otras cuestiones, me ronda por la cabeza vender Diageo y abrir posición en Brown-Forman (sí: Terry inspired). No llego a tanto como para pensar que la directiva actual de Diageo no le llega ni a la suela del zapato al late Sir Ivan Menezes, pero objetivamente veo un balance saneadísimo en Brown-Forman y mucha deuda en Diageo. Sin embargo, veo muchas marcas conocidas en Diageo y con las que me cruzo a diario, y solo una que conozco en Brown-Forman. Alguno me ha dicho que abra posición en Brown-Forman y que mantenga Diageo, aunque no sé si estaría cómodo con tanto dinero en el sector alcohol.

Y por último, más allá de ampliar las sospechosas habituales: HSY, NESN, PFE y DEO, este año tengo dos compañías en el radar: Otis por un lado, y HII (Huntington Ingalls Industries) por otro. La primera es para aprovechar el tirón en construcción que creo que vendrá en los próximos años; la segunda requiere mucha más explicación que dejo para más adelante, toda vez que no tengo aún la tesis 100% terminada. Por otro lado, si hoy me preguntaran: ¿cuál es la acción que consideras más barata de toda la cartera? diría que es CSX, así que a la mínima que tenga algo más de cash, ya sé a dónde se irá parte del mismo: :steam_locomotive:

Dejo aquí el estado de la cartera a día de hoy:

32 Me gusta

No se agobie, @JTinversor , por ese sendero hemos pasado prácticamente todos (y seguimos aquí :sweat_smile: )

Por si le sirve de ayuda, hay ciertas cosas en las que al menos yo he ido evolucionando, no se si para bien o para mal, pero al menos ha sido el camino que he seguido.

Lo primero es que debemos ir con extremo cuidado con la narrativa, y la de las empresas de calidad, que a mi personalmente me encanta, también entraña sus riesgos, pues si reducimos a la mínima expresión el acto de invertir, al final se trata de comprar crecimiento futuro a buen precio y aquí empiezan los problemas pues podemos haber comprado ese crecimiento muy caro si realmente no crece a la tasa esperada o decrece.

En este punto y siguiendo el Manual del buen Boy Scout de Calidad, lo que realmente debe uno mirar es la evolución del negocio y no de la cotización y eso lo echo a faltar en su texto. Si uno ha apostado por un negocio que sigue creciendo como un roble, lo que haga la cotización es un poco lo de menos, y visto por el lado bueno si ya cuenta con una señora cartera, ese año pagará menos impuesto de patrimonio poseyendo buenos negocios en su holding.

Al final todo va de desenchufarse un poco del resultado y centrarse más en el proceso, y asumir que en todo esto hay una parte de aletoriedad que no es la excepción sino la norma. No es si pasará o no, sino cuando pasará.

Lo segundo es que las empresas “de calidad” del pasado no tienen porque ser las del futuro. Hoy creo que todos reconoceríamos que Amazon es una empresa de calidad, pero hace diez/quince años, se veía más como una acción sobrecalentada de crecimiento. Curiosamente a inicios de este siglo, el comercio on line representaba como un 2% del total, y estábamos ante un despliegue de crecimiento que hoy se ha demostrado impresionante.

Quizá con alguna compañía de bebidas alcohólicas esté pasando algo similar, y las nuevas generaciones vean el alcohol como lo que es, un producto tóxico (que está francamente bueno), pero que puede llegar a arruinarte la vida, por lo que esa calidad del pasado, sea año tras año un mero recuerdo que se va desdibujando.

Quien sabe si las empresas de calidad de los siguientes diez años estarán en la tecnología en cosas raras de narices hoy, que serán la norma entonces. De esto he ido hablando bastante con @Fernando , que tiene la mala costumbre de tocarme los bemoles y sacarme de la zona de confort con preguntas incómodas, pero con mucho sentido común.

De estas cosas tan majas y entretenidas hablamos en nuestro último Podcast que grabamos ayer, y que en cuanto nos de luz verde nuestro flamante nuevo patrocinador compartiremos con todos ustedes.

30 Me gusta

Lo más importante es que se tranquilice @JTinversor y no tome decisiones precipitadas. Vayamos por partes como Jack.

Es importante no pensar en el marcador. Es decir, que una posición vaya en -20% o en +20% nos es indiferente. No puede pensar que todas las posiciones vayan a estar en positivo, jamás va a pasar eso, ni que tiene que conseguir promediar para bajar el precio medio, y así que a lo mejor haya un tirón hacia arriba y conseguir que la posición llegue al 0%, a las famosas tablas.

Simplemente hay que evaluar una posición al precio que está y sus fundamentales. Si hubiera intentado “poner el marcador de nuevo a cero” en varias posiciones que he tenido en el pasado, lo mismo ahora estaría en bancarrota y/o en el psiquiatra. Por ejemplo: Bayer o Unibail-Rodamco-Westfield. Por cierto, un par que ahora son apestadas, pero que en su momento eran calidade europea, aristócratas europeos y demás rollos macabeos.

Hay una tendencia hoy en día a vender cualquier estrategia como sólida, como que es imposible de perder con ella y que además cualquiera la puede realizar. Ahora parece que lo fácil e imposible de perder es comprar BTC. Bueno, ya le digo yo que…

Bueno, pero entonces va la cosa bien. Quizás algo de su frustración viene de ver al vecino conseguir mucho dinero de la noche a la mañana. Yo le diría que se centre en lo suyo, ya que su objetivo era…

Este era su “prospectus” al empezar a construir esta cartera. Por ahora parece estar cumpliendo con lo que usted diseñó al comienzo.

Ahora imagine perder varios años de sueldo en un mes. O una época de varios meses de bajada lenta pero constante, donde las pérdidas de miles de euros se acumulan lentamente. Se necesita estar un poco tarado para mantenerse cuerdo tras todo esto.

Porque la gente se cree que esa cifra es suya, cuando no amigo no, eso solo es tuyo si vendes todo JUSTO en ese momento.

Esta valorando su decisión “post-mortem” simplemente por lo que ha hecho el precio en los últimos meses. No sabe donde van a estar en 5 años y como de buena ha sido su decisión.

¿Cree que se hubiera interesado por el oro si no hubiera acabado su mejor año en bastante tiempo?

Tema ladrillo. Debería pensar si ese tipo de inversión va con su personalidad. Me refiero. Si comentamos que para invertir en acciones, lo mismo hace falta ser un poco psicópata, o quizás, tener ese desapego tarado hacia el dinero, la inversión en ladrillo me da que es lo opuesto casi. Se necesita tener ese “don de gentes” y esa habilidad para tratar con inquilinos, manitas que te hacen reformas, patearse ciudades en busca de la oportunidad y más burrocracia.

Muchas veces se incide en rentabilidades y blablabla, pero yo diría que lo principal es hacer una reflexión interna de que quiere cada uno o cuales son sus puntos fuertes.

Una empresa que se encuentra a una valoración exigente, con bastantes incógnitas en China y que ha subido al calor de su nuevo CEO “rockstar”. Bueno, una ganadora de 2024, que podría ser una perdedora en 2025. No tengo ni idea y no digo que esto vaya a pasar, pero las narrativas que siguen al precio de algo polucionan todo.

Hombre, tenga en cuenta que la posición alta de deuda no es cosa de la actual directiva, y si más causa última del señor Menezes y todos los últimos años de vino y rosas al calor de una expansión de múltiplos desmesurada. Que lo de recomprar acciones a 30x beneficios perjudicando tu posición de balance ya se hacía en 2021.

Esto del alcohol es otra más de narrativas, ahora parece que nadie quiere beber más alcohol. Pero quizás el asunto es más simple y es que quizás, y siempre quizás, lo de que esta tipología de empresa que crece lo que crece, cotice a 25-32x beneficios es muy excesivo. Siendo además una industria con sus problemáticas, como la de tener que andar realizando muchas adquisiciones que luego realmente tampoco te van a ofrecer grandes retornos.

Simplemente parece que los múltiplos han vuelto a una media más razonable. Habla usted de que se arrepiente de no haber comprado Altria por ejemplo, ¿por qué el tabaco ha pulverizado al alcohol en los últimos tiempos? Pues hombre, es que lo mismo ha habido momentos en que el alcohol ha cotizado al triple de múltiplos que las tabacaleras. ¿Es el alcohol un negocio 3x mejor que el tabaco?

Menuda turra le acabo de soltar. Así la conclusión yo diría que es centrarse en lo suyo, seguir el plan inversor que se marque en época de tranquilidad y sobre todo, evitar las narrativas del precio y evitar decisiones en base a lo que haya hecho el precio de la acción.

Se trata de encontrar un sitio donde finalmente se sienta cómodo con sus inversiones y pueda estar tranquilo en momentos de alta tensión en los mercados.

35 Me gusta

Salgan las cosas bien, mal o regular, al invertir por nuestra cuenta lo que es seguro es que los picos de volatilidad van a ser distintos a los del mercado. Esto que parece una tontería es en realidad de lo más difícil de soportar: ver otras cosas subir y las propias bajar no es agradable para nadie pero no queda otra. A medida que se concentra pues esto se magnifica aún mas y por eso poca gente aguanta con una empresa (o puñado de empresas) en cartera mucho tiempo. Cuando suben es, en mi experiencia, todavía mas difícil de aguantar.

Lo único que puedo decirle es que mejor no valorar sus decisiones por lo que hace el precio a corto plazo y que valore si sus empresas tienen sentido, o no, en el momento actual por sus fundamentales presentes.

Luego, si le es muy difícil aguantar la comparativa con el mercado, siempre puede indexar una parte de la cartera.

28 Me gusta

Al final toda estrategia de inversión tiene en algún momento su parte de travesía por el desierto, antes o después.

Con las empresas de calidad compradas cuando todo les va relativamente bien, que quizás ha venido siendo su estrategia, lo que uno pone encima de la mesa es mucha paciencia para superar esos momentos, temporalmente si uno acierta, de peores resultados (y consiguientemente, de peor múltiplo, siquiera de nuevo temporalmente). Por supuesto claro, tiene que acertar con que seguirán teniendo crecimientos y rentabilidades decentes muchos años, pero ahí yo le veo buen gusto :wink:

Esta semana por ejemplo he estado mirándome una a priori de mucha calidad, pasando por un bache, y luego cuando me he mirado muchos años de su historia, resulta que es más cíclica de lo que parecía, que el negocio te drena mucho en algunos ejercicios en capital circulante, que es internacional por ventas pero muy local en % de beneficios (en un país digamos problemático cara a que sus ciudadanos prosperen a futuro…)… y en fin, es una competidora directa de LVMH, apuntaba maneras, pero no. Si uno no la investiga a muy largo plazo igual la hubiese comprado antes de la caída del 30 % que lleva este último año (si seguía al ritmo que iba lo merecía, el fallo era ese, que resulta que tiene pegas). Aunque aún no he terminado de analizarla probablemente yo no la compraría a precios actuales.

Si compras negocios decentes pero que son muy pequeños, que me suele pasar a mi, la travesía por el desierto la sueles tener desde el minuto 1, porque no se va a poner en precio justo cuando llegas tú, igual nunca en su historia ha cotizado a la valoración que tú le presumes (casi que en el fondo te conformas con el escenario de que entre crecimiento y divis ya te dé un buen retorno). Quizás esa es la diferencia con las de calidad cuyo negocio va bien, que con estas uno espera que sigan subiendo cada año con normalidad, pero también tienen sus baches (a veces incluso el negocio sigue yendo bien, pero el riesgo asumido era el de la sobrevaloración, te baja un poco la expectativa de crecimiento, y suben los tipos de interés y ya para abajo).

Sobre el inmobiliario coincido con @Waits, yo les gestiono dos plazas de garaje a mis padres, que por lo demás dan cuatro duros, y entre las puertas que se les estropean, el mando, este invierno que si goteras en un garaje cuya comunidad no se puede permitir las obras para poner un techo nuevo (y hay que buscar un apaño para que no le manche el coche al inquilino…). En fin, no quiero ni imaginar lo que será un piso, a mi me agobia mucho, soy del tipo de inversor que prefiere no tener que tratar con nadie y a cambio quizás controlar menos.

Sobre el inmobiliario también se suele dar por hecho que no tiene riesgo de valoración y tal, yo tengo familiares con algún piso comprado nuevo en época del boom, y que hoy día lo siguen teniendo alquilado, cuando querrían venderlo, “porque no les ofrecen lo que vale”. ¿Sabe qué es lo que vale? Pues como mínimo lo que valía cuando lo compraron :slight_smile: no cambia tanto la película si la comparamos con la bolsa, sesgos parecidos (y lo cierto es que para lo que renta alquilada, la ciudad, que es durilla, y demás, a mi me parece bastante ajustado lo que les ofrecen, pero claro, si no venden “no pierden dinero”, jeje).

Aunque no es fácil le animaría a centrarse en la parte de su excel de generación de dividendos, que era lo que a muy largo plazo le interesa y presumo ilusiona, y en que ahora tiene la oportunidad de comprar las empresas que le gustaban probablemente con mayor rentabilidad por dividendo y avanzar así más rápido en su objetivo :muscle:

21 Me gusta

Toda una clase maestra, con mas de una respuesta me ha hecho usted que se me encienda la bombillita.

5 Me gusta

Gracias por la interacción, @jvas , me gusta ver que esta entrada ha despertado comentarios y un poco de engagement. Voy a intentar responderle

Sí, en esto estoy totalmente de acuerdo, este último post era más bien de aspecto psicológico; aunque he intentado hacer post que incidan un poco más en aspectos de valoración o rumbo del negocio; por lo que el próximo post que haga en el blog va a centrarse más en temas de números, sin perjuicio que siempre he considerado que “voy cojo” en valoración, por más libros que voy leyendo sobre la materia. Respecto al rumbo del negocio, ahora mismo estoy un poco “acojonao” con Starbucks el día 28, pues temo que de no salir unos buenos resultados, el mercado volverá a darle fuerte a la acción. Por las demás, salvando lo que ya he mencionado en otras entradas respecto a Hershey y Pfizer, creo que la totalidad de acciones en mi cartera, salvo CSX, no van mal del todo. Nestlé, ahora mismo, es otra que necesita aportar algún signo de crecimiento, toda vez que pasa un poco lo mismo: los accionistas necesitan un poco más de alegría que a la que la empresa tiene acostumbrado a su accionariado en los últimos años.

Creo que este es el gran inconveniente/problema que tiene invertir en acciones individuales, que no es otro que ser capaz de discernir cuándo la calidad deja de serlo, o cuándo la calidad está pasando un mal momento y que, lejos de vender, hay que comprar. En mi caso, creo que Hershey es el mejor ejemplo para ello. Era una empresa de calidad tremenda a $270, y con la caída que está teniendo nadie la quiere. La gente parece no saber que pasó otros cuatro años de travesía en el desierto entre 1998 y 2001, casi 7 años plana (ahí es nada) entre 2005 y 2011 y otro período de cinco años malos entre 2014 a 2019. Conozco a una persona que ha sido accionista desde 1990, y te dice que estas “travesías” por el desierto son normales en esta acción, solo que la subida en vertical de los últimos tres años hace olvidar que se trata de una empresa que depende de un “commodity price” y que eso la convierte casi “en cíclica”.

En mi modesta opinión, y podré estar más o menos equivocado, creo que lo relevante es mirar la ejecución del management, y veo que no han bajado las asignaciones de gasto a márketing. Ello implica que no pasará lo mismo que 3G Capital y KraftHeinz: bajaron la inversión en marketing y valor de marca y al cabo de poco tuvieron que hacer impairments. Eso no ha pasado en Hershey; es más, mantienen inversión y creación de marca a sabiendas que se reducirán los márgenes. Mi post va, simplemente, en el sentido que aunque uno entienda que está comprando calidad con problemas temporales, siempre tiene un punto de frustración al ver un -20% en su primera posición.

Es también una de mis grandes incógnitas. Llegará el día en que veamos a Visa como “value”, igual que el sector de crecimiento de los años 50 y 60 (petróleo y midstream) es lo más Value hoy. Es por eso que siempre tendré ese pensamiento que decía el gran Witten de invertir cada mes en el MSCI World para aquellos que tengan un horizonte superior a 30 años, y que pocas cosas lo van a superar.

Una cartera como la mía creo que sirve como muestra que uno puede crearse un portfolio dividendero sensato al que darle impulso durante diez años y que dicho portfolio después se “irá cuidando a sí mismo” con reinvertir dividendos y poco más. Sin embargo, tarde o temprano los índices se irán despegando del portfolio, pues creo que la calidad cambia con el tiempo y que conocer la calidad de dentro de 10 años exige anticiparse mucho, tener mucha visión y aceptar, lo que no es fácil, este punto de

Lo cual me parecía interesante de publicar porque probablemente cuando dentro de 5 años vuelva a la entrada anterior me ría, pero que sirve de “amable recordatorio” que calidad no es igual a crecimiento continuo y constante, sino, a veces, estar contento con no perder dinero.

Que por otro lado, creo que debe ser el objetivo principal de todo inversor.

¡Gracias por el aporte! Me ha gustado mucho ver que la última entrada ha despertado interacción.

11 Me gusta