Efectivamente, este tema creo que es polémico e interesante a la vez. Empezando por su pregunta sobre si la lectura está sobrevalorada, mi respuesta sería que depende. Si nos atenemos a lo que la gente dice, sí que considero que está sobrevalorada. Si, en cambio, nos atenemos a lo que la gente hace, pienso que no.
Y es que en este tema hay una importante disonancia entre lo que se dice y lo que se hace. Casi todo el mundo parece valorar la lectura como muy importante pero la realidad es que se lee poco, así que tengo mis dudas sobre cuál es la verdadera valoración que se le da.
Sobre la lectura de textos técnicos, ensayos, etc., parece que todos coincidimos en su gran importancia. En este aspecto no cabría hablar de sobrevaloración. Bien distinto es cuando hablamos de literatura de ficción. Parece que la opinión mayoritaria es que no existiría tal sobrevaloración, postura que no comparto plenamente.
“Considero que un hombre que después de los 40 años todavía lee novelas es un puro cretino” dijo Josep Pla. Creo que con esta sentencia buscaba provocar, y en absoluto calificaría como tales a aquellos cuarentones que disfrutan de una buena novela. Pero lo cierto es que si bien es indiscutible el valor estético y el deleite que puede llegar a producir una obra literaria, tampoco iría mucho más allá en la valoración de las funciones que tradicionalmente se le han asignado. A continuación desgloso algunas de ellas.
Artitóteles ya hablaba en su Poética de que la literatura es una imitación de la acción y de la vida. Por tanto tendría un valor descriptivo de un tiempo y un lugar. Y al parecer le otorgaba más valor que a un texto historiográfico. No puedo estar más en desacuerdo. El escritor de una novela, aunque sea de la corriente realista, no tiene obligación de ser fiel a la realidad, e incluso aunque lo consiga, no deja de ser su realidad y la pretensión de objetividad que se le presupone a un historiador queda en un segundo plano en el caso del novelista. Así pues, si se busca comprender el pasado, considero superior el trabajo del primero al del segundo.
Otros han destacado la función social de la literatura, pero este es un punto que me hace sentir bastante incómodo teniendo en cuenta la deriva que este pensamiento produjo, sobre todo en el siglo pasado. Los teóricos marxistas, desde el materialismo histórico, han considerado que la literatura es una superestructura ideológica y algunos líderes comunistas como Mao no dudaron en considerarla que debía ser una herramienta más de la revolución. Creo que a la literatura se la debe dejar tranquila y no obligarla a cargar con una cruz que le correspondería a otros.
Si descontamos estas dos funciones, aun nos quedaría al menos una tercera función, la moral, que nos retrotrae a la catarsis aristotélica. Es muy cierto que la novela puede despertar sentimientos muy elevados, pero realmente no es algo ni mucho menos exclusivo de ella. Y en última instancia habría que preguntarse si un texto de ficción aporta al respecto un sustento más sólido que un tratado de sociología, filosofía política o moral.
Dicho esto nos queda el innegable valor estético y placentero de la novela, pero no alcanzo a entender por qué ello tiene que otorgarle un valor superior a su lectura. ¿Por qué consideramos más elevado leer una novela que bailar o ir al cine? ¿Acaso no hallamos también estética y disfrute con estas actividades? Y siendo reduccionistas, la estética no tiene razón de ser si no es porque al lector le produce una sensación placentera. ¿Es más noble leer una novela o pasear por el campo? Un sí incondicional a lo primero creo que sería un ejemplo de la sobrevaloración de la que hablamos.
En definitiva creo que lo importante es la calidad de lo que se lee. Estoy de acuerdo con la revelación de Sturgeon, que viene a decir que el 90% de lo publicado es basura. Un lector poco exigente puede leer cientos y cientos de novelas sin sacar gran cosa de provecho más allá de unos ratos entretenidos. En cambio un lector más selectivo y que asimile plenamente los contenidos puede sacar grandes beneficios de otro tipo de literatura con más contenido informativo. En resumen, coincido con la postura de @Jadiar y mi respuesta final sería que leer está sobrevalorado o no dependiendo de cuál sea la verdadera valoración de la gente y del tipo de literatura del que se trate.