¿Lo escuchan? … es una introducción tenue, casi imperceptible… avanza lentamente y va ganando intensidad. Si uno pone atención, puede percibir los primeros acordes.
Más tarde entrarán los versos, luego vendrá el estribillo y finalmente el cierre. Justo cuando estén sonando los primeros compases del cierre, ya habrá entrado una nueva introducción, de modo que la eterna canción siga sonando, ad eternum, mientras los negocios sigan funcionando.
Ha llovido ya bastante, desde que los Value Investors, partían la pana. De aquellas bellísimas melodías que nos hacían a todos bailar y regocijarnos alrededor de la hoguera, hoy sólo quedan las ascuas, unas comisiones desproporcionadas, y algunos ataques bastante desafortunados al nuevo rey de la canción. No se sorprendan…son negocios, y uno perdona todo, menos que le quiten el caldero.
Andaba todavía el anterior rey de la canción sacando libros, cuando desde el Reino Unido llegó otro megahit del verano, con más acordes de guitarra, unos instrumentos más evolucionados y vendidos en un formato más económico. De nuevo, parecía evidente que la nueva música llegaría a cualquier parte. Su tema estrella …“Where have you been all this time, Terry?” , enloquecía a las masas, y hacía surgir las nuevas versiones íberas, que se subían al carro para cabalgar la ola, si bien con mucho lirili, y poco lerele…
Todavía no ha dado sus últimos compases , nuestro particular “Despasito”, y ya suena la intro de los nuevos reyes del mambo. Ya ven, nihil novum sub sole. In nomine patris etcétera…
En nuestra particular verbena inversoril, lo mismo te ponen un tema de los 90, que del 2000, que del 2019. Que el público ya no enloquezca con el Bolero Mix 8, no quiere decir, que nuestro particular DJ, no deje de pincharlo. Ya saben que en las bodas, el tio Manolo enloquece con un pasodoble, y la sobrina Susi con el riguitón, y básicamente, en este eterno enlace marital es lo que pasa, de modo que le ponen a uno la cabeza como un bombo, porque hay canciones, estilos y versiones para aburrir.
Lo mejor para que un temazo pegue duro, es coger una canción clásica antigua, y sacar una versión. Los más puristas pensarán que están destrozando un clásico, pero los productores, saben bien que de eso niente. En el bisnes, lo importante es que bailen, y que la musiquilla no se les vaya de la cabeza, y si para eso hay que tomar una canción antigua y meterle una base de riguitón, pues se le mete. En este negocio los puristas no son rentables, y como los grandes sabios de Telepizza descubrieron, “el secreto está en la masa”.
Si no se creen este último punto, miren al bueno de Warren, que de tanto haber sido nombrado y versionado, ha pasado de referente, a ya estamos otra vez con las frasecitas del abuelo cebolleta y sus impenitentes palmeros. Si no sabes pensar, qué mejor que tomar prestado los conocimientos de otro. Apuesto a que les vienen a la cabeza unos cuantos especímenes de nuestro micromundo …
El nuevo estribillo que en mi probablemente errada percepción dominguera, va a partir la pana, puede que sea el rock and roll de Bernstein y Bogle … con su "Blues de los Aristogatos", “El 85% de los fondos activos no baten a los pasivos, mami” o “Amigo índice, que fuerte te has puesto” . Bellísimas canciones que se popularizaron en yankeelandia hace ya bastantes años, y que como todas las cosas sensatas, tiene un tiempo y un lugar, y luego ya, múltiples versiones pegadizas con mayor o menor fortuna, cuando se escuchan en mal momento.
Hace un tiempo,un profesor bien inteligente que tuve, me dijo algo como…“Cuando te digan que sólo usamos el X% del cerebro, bla, bla, bla…”., intenta ser crítico… ¿Quien define el 100%? ¿Es estático el 100%? Por definición, ese razonamiento carece de sentido, pues no es posible saber que tomamos como 100%.
Del mismo modo, si tomamos una gran variedad esos estudios, deberíamos ser algo más críticos.
- ¿El 85% es siempre el mismo porcentaje a través de los años?
- ¿El perfil de los inversores es el mismo ahora, que hace diez años, por poner un ejemplo?
- ¿Hay alguien medianamente inteligente, que no vea que hay un estudio para defender cada posición?
- Si esta estadística no le gusta, le pongo otra, como forma de vida.
Qué peligro tiene meterle en la cabeza a la gente gráficas, que en muchos casos son simple y llanamente mentiras de inicio, o que han dejado de ser ciertas en la actualidad. ¿Mala leche o ignorancia? ¿Mezcla de ambas?
Personalmente, siempre he sido (y soy), un enamorado de la gestión pasiva. Me parece un concepto excelente, y que además, ha hecho mucho para bajar del atrio a todos los señores que quemaban billetes en su avión privado, con el beneplácito de una masa demasiado inculta para darse cuenta de que le estaban haciendo la del trilero.
Pero claro, una cosa es que te guste el concepto clasico, lo tengas como una parte de tu cartera, y otra muy distinta es que uno se sature de oir tantas veces la misma canción en la radio, y que prácticamente te miren como si fueras bobo, si decides ponerte a seleccionar empresas. Y esta canción que empieza a sonar, no será diferente.
Hace años, alguien dijo que “cuando veía a su limpiabotas hablar de bolsa, era el momento de vender todo”. Hoy ese limpiabotas, son los medios generalistas. Las semillas empiezan en lugares como este no nos equivoquemos. Los medios generalistas no pueden tener ese privilegio, porque carecen de pensamiento y son meros amplificadores de las masas. Pero se desarrollan en ellos y mueren, el día que los limpiabotas le vacilan a los profesionales porque se han ventilado su track record a 1 año vista. Recordemos que cualquier estrategia va a tener malos momentos. Cualquiera.
Puestos a generalizar, a mi también me dan grima el 85% de los profesionales, pero eso no quita, que un 40% de los mismos, sean unos fueras de serie, que se baten el cobre para crear riqueza.
En mis listas de Spotify, rara vez suenan los “40 principales del momento”, lo cual no es ni bueno ni malo en si mismo. Es sólo como es.
Esta historia no es nueva. Y gente de la talla intelectual de muchos de los que aquí escriben, no se cansan de repetirlo, aunque no se les escuche.
Cuando se dice “interiorizar el proceso” , básicamente se traduce en seguir la hoja de ruta que uno se ha marcado. La tentación, sin embargo de cambiar de carril, siempre estará ahí, y de hecho, si en nuestro carril hay un accidente, es absolutamente imprescindible cambiar, si o si.
Cuidado también con confundir “entender la estrategia”, con conocer los productos de las empresas que se poseen. Coger con la mano el palo de un churrero, no suele ser buena idea. Recuerden que el éxito invirtiendo, pasa por comprar cosas por menos de lo que valdrán en el futuro, y si bien hay grandes compañías que a diez años seguirán generando más y más eps, otras muchas no lo harán.
Punto básico. Conocido y cómodo no son sinónimos de rentabilidad futura. Y si no me creen, al tiempo. Del mismo modo que desconocido e incómodo, tampoco lo son.
¿Qué difícil entonces, verdad? Pues si, ciertamente difícil. Y esa es la razón de que no seamos todos millonarios.
La inversión, es un gigantesco buffet libre, en el que siempre hay alguien que dice…“En el salón Kansas, hay un chuletón que quita el hipo”… Y tiene toda la razón, porque ese chuletón se deshace como la mantequilla. El problema es que para cuando uno llega, no quedan ni los huesos, y siempre hay otro señor diciéndote, que ese chuletón en el fondo era un timo, y que “el sushi del salón Okinawa”, si que es miel de romero.
Como ven, no hay una sóla receta para el éxito, aunque lo que si es cierto, es que si la comida nos ha gustado, no nos importa lo que hayamos pagado, pero si encima de que no nos ha gustado, además nos han metido un clavazo, no volveremos a ese restaurante ni hartos de vino. O si, pues masoquistas hay en todos lados.
Del mismo modo, si era muy barato, pero la calidad de la comida era mala, y la carne estaba buena, pero el chimichurri estaba pasado y pasamos una semana perdiendo kilos a marchas forzadas, tampoco estaremos muy contentos, porque lo barato, habrá salido caro.
Para comer ya saben. Buena comida (la que sea buena para ustedes) y calidad-precio.
Coman y bailen con la música que les guste. Disfruten. Enzárcense en discusiones bizantinas sobre si AC-DC es mejor que Daddy Yankee, o simplemente dejen vivir. Personalmente, yo he tomado este segundo camino, y me niego a revolcarme por el fango,lo cual no quita, que no pueda decir lo que pienso, y que me toque un pie ser políticamente incorrecto. Yo he venido a esta vida a ser yo, y a pensar por mi mismo, con mis aciertos y mis errores.
Como decía Mark Twain, “Es más fácil engañar a la gente, que convencerlos de que han sido engañados”, por lo que suene la música que suene, dejémosla sonar. Cada vez sonará una melodía nueva, y nada mejor que mientras suene el nuevo ritmo machacón, coger un buen libro, pasarse por Recomendaciones musicales , si uno quiere ideas, o simplemente seleccionar esas canciones que tanto le gustan a uno, y olvidarse del ruido.
Pero no se olviden…pase lo que pase… keep the music playing.