Como cada mañana, Jaimito se enfundó las botas de pescar y, no sin cierto esfuerzo, se llevó al hombro su caña mientras agarraba el asa de un cubo vacío. Desde hacía unos cuantos años acompañaba a su padre al río más cercano de su casa, quien le enseñaba los entresijos de la pesca. De los resultados de esta actividad dependía la subsistencia de la humilde familia ya que la mayor parte de la captura se la quedaban ellos mismos como comida. Jaimito era consciente de que, aunque sus padres y hermanos no se podían permitir grandes lujos, nunca había faltado un plato de comida en su casa, cosa que valoraba enormemente a pesar de su juventud. Padre e hijo tomaron esa mañana el corto sendero que les llevaba al río, pero como venía ocurriendo en los últimos días, Jaimito estaba más callado de lo habitual. Absorto en sus pensamientos, venía desde hace un tiempo sintiendo compasión por la vida tan austera que llevaba su padre como cabeza de familia. Consideraba escasa, repetitiva y aburrida la dieta alimenticia familiar consistente en el mismo tipo de pescado que proporcionaba el río. Sin poder aguantarse más la pregunta que no cesaba de rondarle en su cabeza últimamente, subió la mirada hacia los ojos de su padre y le planteó: “Papá ¿por qué siempre vamos a pescar a este riachuelo pequeño por donde pasan pocos pescados, y no nos dirigimos al océano que tenemos un poco más lejos pero que tiene una gran cantidad y variedad de todo tipo de peces?”. Sorprendido porque su hijo hubiese interrumpido el silencio reinante con ese desparpajo, el padre acarició cariñosamente con su mano la cabeza de su vástago y le dijo: “Jaimito, déjame que te cuente la fábula de las gestoras value y lo entenderás”
Hace unas semanas compartí un (muy sencillo) estudio comparativo de la diferencia de rentabilidades de algunas gestoras entre sus planes de pensiones y los fondos que supuestamente replicaban. Hoy, y aprovechando este hilo que hace tiempo que no se participa, quiero compartir los resultados de otro mini-estudio comparativo, pero esta vez los protagonistas son los fondos ibéricos vs los fondos internacionales de una misma gestora.
Por tanto, vayamos al grano y comparemos las rentabilidades acumuladas obtenidas por los fondos de las diferentes gestoras en el tiempo. Antes de presentar los resultados, debo advertir lo siguiente:
- Los datos han sido obtenidos por la propia información suministrada en la los folletos o cartas mensuales/trimestrales de la propia gestora. No entro a valorar si el índice de referencia que toman es el más idóneo o si hay razones justificadas por las que a partir de algún año concreto se modifica.
- Se compara con el mismo horizonte temporal, de tal forma que si el fondo ibérico tiene 15 años de existencia y el internacional 10, se toman las rentabilidades únicamente de los últimos 10 años para ambos.
- Este análisis únicamente tiene como objetivo comparar los fondos ibéricos vs internacional dentro de las respectivas gestoras. En ningún caso los resultados obtenidos sirven para hacer un estudio comparativo entre gestoras, ya que el periodo de tiempo de los datos extraídos es diferente, y los índices de referencia que se utilizan por cada una de ellas también.
Pues bien, a modo de resumen, les plasmo aquí el siguiente cuadro:
Los resultados son los siguientes:
- Los fondos ibéricos de todas las gestoras analizadas han obtenido rentabilidades acumuladas superiores en el tiempo a los fondos internacionales (columna A-D)
- Más sorprendente es que lo anterior se haya cumplido aún a pesar de que los índices de referencia internacionales han obtenido mayores rentabilidades acumuladas que sus homólogos ibéricos. (columna B-E)
- Por tanto, todas las gestoras analizadas ofrecen un mayor “valor añadido” en sus productos ibéricos que en los internacionales (columna C-F), entendiéndose por “valor añadido” como la diferencia en rentabilidades del producto (fondo) con respecto a su índice de referencia.
Pero ¿pasa esto solo en las gestoras españolas? Tomemos los datos de gestoras extranjeras, entendiendo que tienen un fondo nacional (geográficamente más limitado y en el que son especialistas) y un fondo internacional. Así por ejemplo, el “Fondo Nacional” de Amirall sería el Sextant PEA (invierte mayoritariamente en Francia) y su índice de referencia es el índice francés CAC All Tradable NR, mientras que el fondo internacional sería el “Autour du monde”
Tal y como se puede ver, los resultados llevan a las mismas conclusiones que para las gestoras españolas. Aún a pesar de que los índices de referencia internacionales son más rentables que los nacionales, y por tanto, se podría pensar que sería más conveniente (por diversificación y por rentabilidad) dar un mayor peso a la cartera internacional vs nacional, a la hora de invertir en fondos value de gestores no es descabellado ponderar en mayor grado la parte nacional, tal y como comentaba @MAA en el mensaje inicial.
Nota (para quien le interese): Con el paso de los años, Jaimito se convirtió en adulto y fruto de su matrimonio dio vida a 3 retoños. Siguiendo la tradición familiar y la cultura de su región, se ocupó de proveerles la comida necesaria para subsistir. Y, como no podía ser de otra forma, la fuente de todos sus alimentos provenía del mismo río que prácticamente le había visto crecer. Después de escuchar la fábula que su difunto padre le contó en su niñez, Jaimito llegó a la conclusión de que en ocasiones la probabilidad de tener un plato de comida encima de la mesa es más alta si uno va a pescar al estrecho pero conocido río que pasa cerca de su casa en lugar de acudir al inmenso océano atraído por su diversidad y el tamaño de sus pescados.