No es que no me convenzan las bromas, lo que no me convencen son las incoherencias, y en sus inversiones (y rotaciones) hay múltiples. Puede ver su tesis de inversión en IMB en la que se demuestra que no sabía nada del sector en el que invertía, seguida de su compra (y venta casi automática) de PM que aún resulta más incomprensible.
Lo que ocurre es que uno de los activos más infravalorados de muchas gestoras son esos partícipes que defienden de forma incondicional a sus gestores.