Podcast +D 129. La mente del Inversor. Con Fernando Gonzalez

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En este nuevo episodio de Conversaciones +D, nos reunimos con Fernando Gonzalez, psicólogo y autor de libros que son realmente interesantes.

Nos interesa especialmente profundizar en los sesgos que tenemos como personas (e inversores), porqué en muchos CEOs de las empresas cotizadas conviven rasgos de la Tríada Oscura , propia de los piscópatas, y de si es posible ir modelando la mente y cambiarla para hacernos mejores inversores.

No dudes en plantear tus cuestiones en el hilo.

IMPORTANTE: Si tienes una empresa y te apetece patrocinar el podcast, contáctanos por privado o escribe a marcos.alvarez@masdividendos.com. Miles de personas escucharán este3 podcast, y tu empresa puede ganar visibilidad y relevancia.

En su bio en LinkedIn, podemos leer:

Psicólogo con habilitación sanitaria y formación jurídico-forense, que ha centrado su trabajo en el estudio de la conducta humana. En una primera fase, seleccionando y formando a personal de alta cualificación para la Secretaría de Seguridad del Ministerio del Interior. Esto le permite comenzar a trabajar en profundidad los procesos que están detrás de la respuesta que damos en diferentes circunstancias. En el año 2010 comienza a realizar trabajos de consultoría y asesoramiento de situaciones de interacción compleja, como actividad privada, creando para ello FGD (Formación Gestión y Desarrollo) y trabajando con entidades públicas y privadas. Todo ello le permite comenzar a tener una visión bio-psico-social de los procesos de la respuesta humana, esta visión la desarrolla en un sistema al que denomina NeuroNegociación™, marca que patenta en la OEPM (Oficina Española de Marcas y Patentes) y cuyo principio es “no negocies con las personas, negocia con el cerebro de las personas” ya que es quien toma realmente las decisiones. Comienza a ver que este sistema puede utilizarse también para el desarrollo y crecimiento personal, mejorando el rendimiento de las personas. Para ello, realiza estudios de terapia de conducta humana centrados en infanto-juvenil (un año) y Adulto y familia (dos años) en el gabinete de psicología Luria de Madrid, y allí se enfoca en entender cómo trabaja y funciona un centro de psicología.
Une los principios de NeuroNegociación™ a los parámetros aprendidos durante estos tres años en Luria, y patenta un producto enfocado en los procesos bio-psico-sociales que están detrás del desarrollo y crecimiento personal, procesos que ayudan a una mejora eficiente del rendimiento personal, al que denomina NeuroCoaching™ y patenta en OEPM.
En octubre de 2017 abre Centro Mindset, centro de psicología, que trabaja desde unos conocimientos científico-técnicos con el objetivo de resolver problemas y cubrir necesidades de sus clientes. Desde donde desarrolla su labor como terapeuta, asesor, consultor y docente en matera de conducta humana.
Para dar una mayor eficiencia a Mindset, a finales de 2020 Mindset se convierte en Grupo Mindset, con un centro de acompañamiento psicológico y mental y una consultora estratégica integral en conducta humana, desde donde se trabaja Ingeniería de Conducta™, metodología patentada en OEPM y que se centra en el trabajo de generar influencia en la conducta humana.
En la actualidad Grupo Mindset, cuenta con clientes en tres continentes, sus principales clientes son ejecutivos/as de entidades privadas y deportistas.

Tiene podcast realmente interesantes, dejamos un par que están muy bien:

Un libro muy recomendable:

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Un saludo, Sr. González.

Me gustaría saber su opinión sobre cual es el principio que, con carácter general, cree Ud. que gobierna inicialmente nuestro comportamiento y existencia:

a) Hemos venido a este mundo a ser felices.

b) Hemos venido a este mundo a sobrevivir.

Si bien este es un foro de inversiones, no me refiero a este en concreto apartado, aquí ya sabemos todos que se engloba en el b, sino a aquello que denominamos “nuestra vida”, la inversión es una mínima parte de ella.

Gracias por su opinión.

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Buenos días Don Fernando,

Ya que tenemos un psicólogo en la sala, me gustaría preguntarle por algún “hack” para desastacar las mentes de mis más allegados. Me explico, esto es algo que se ha discutido muchas veces en este foro y en el podcast.

¿Cómo puede ser que personas muy inteligentes y racionales como mi esposa no sean capaces de entender la necesidad de invertir?
En mi caso particular, estoy casado con una mujer que cree ciegamente en la ciencia y todo lo guía por papers y estudios, pero cuando hablamos de inversión, tiene un miedo irracional a invertir y prefiere dejarlo en el banco perdiendo valor. Le he mostrado papers, estudios, gráficos, dado charlas, etc… y lo máximo que he conseguido es que invirtiera en depósitos hace un par de años cuando las rentabilidades eran algo más altas.
¿Hay alguna guía que pueda dar para desbloquear ese miedo irracional? Lo que creo que más le ha resonado a mi señora es la estrategia de dividendos, eso de recibir dinero contante y sonante le ha gustado como suena, aunque aún sigue sin dar el paso. ¿Alguna estrategia o método como para ir venciendo esa resistencia? Así como si te vas a tirar a la piscina, primero metes los deditos del pie, luego hasta la rodilla… ¿Cuál podría ser el equivalente en el mundo de la inversión?

Muy relacionado con lo anterior, ¿cómo hacer lo mismo pero con los más pequeños? ¿Algún juego o tipo de actividad que pueda empezar a crear estos conceptos en sus pequeñas cabecitas?

Un saludo y gracias

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Muchas gracias a todos por organizarlo. ¿Siente que la profesión está pasando, en general, por un bache? Escucho historias de terapias y consejos que asustan, básicamente por un “el paciente tiene siempre la razón”.

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Perdón por ser tiquis miquis pero precisamente la palabra “ciegamente” y “ciencia” en la misma frase no sé si cuadran mucho :grinning_face_with_smiling_eyes:.

Mis dos céntimos no solicitados, si viendo que a usted le va bien invirtiendo aún así no se anima, es que no está en ella o no es el momento, las personas podemos ser muy irracionales y cabezotas por muchas razones.

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Interesante… es una cuestión semántica, casi filosófica…pero creo que no estoy de acuerdo, y lo argumento.

Supongo que usted quiere decir que el método científico no puede creer “ciegamente” en sus conclusiones, porque siempre está abierto a que con nuevos estudios u observaciones, estas mismas cambien y por lo tanto nunca nada puede ser 100% seguro. Hasta aquí todos de acuerdo.

Pero yo puedo creer “ciegamente” en la ciencia, ergo en el método científico, con lo cual no es que crea ciegamente en lo que dice hoy la ciencia, sino que el conocimiento más actual es lo que guiará mi razonamiento.

Cierto es, y esto lo voy pensando mientras escribo, que en las ciencias no exactas, caso de la economía, será mucho más complicado puesto que las teorías se superponen, se enfrentan y las conclusiones acaban siendo casi un batiburrillo personal.

Después de toda esta disertación, puedo concluir basado en mi observación, que “sí pero no” estoy con acuerdo usted, y “depende, todo depende, de según como se mire, todo depende”. :slight_smile:

En cuanto a mi mujer, yo lo voy a seguir intentando, a riesgo de dejar claro en este foro que “soy un pesao”.

Saludos cordiales

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Le voy a aclarar a lo que me refiero, hay muchos tipos de maneras de ser, los psiquiatras y psicólogos han gastado ríos de tinta en intentar clasificar los rasgos de la personalidad con mayor o menor éxito, en mi experiencia algunas personas tienden a ser más rígidas y otras más flexibles con sus procesos mentales y hábitos, para más inri esto puede cambiar según el tema a tratar, por que hay cuestiones que “parecen” formar parte de nuestra identidad y como nos percibimos, esto se puede observar mucho sabiendo a qué atributo o característica le damos mayor o menor importancia, por ejemplo si yo creo que soy una persona rigurosa y científica, tenderé a darle más importancia que otros que se identifican en mayor medida con otros atributos, así que cuando leo este párrafo:

Por la descripción que hace y el adjetivo de “ciegamente” que utiliza, no he podido evitar tener la sensación de que es una persona “rígida” en ese aspecto y las razones pueden ser variadas, entre ellas, que necesite certidumbre o que le de importancia a tenerla por vivencias o simplemente por inclinaciones naturales, igual que hay gente a la que se le dan mejor las matemáticas y a otros la música. Más allá de estas razones, la cuestión es que en inversión el origen de los retornos reside precisamente en la incertidumbre y esto chocaría frontalmente con su identidad. Lo que concuerda bastante con esta frase, que no es precisamente muy racional:

Imagine que consigue convencerla mostrándole mayor certidumbre, esto es, mostrándole el lado positivo a largo plazo de la inversión, el asunto podría ser que acabe en desastre, ya que si en su naturaleza o identidad está justo lo contrario quizás no sea capaz de aguantar el proceso inversor cuando haya caídas prolongadas y además se ganen tensiones y discusiones que afecten a algo más importante que es la relación.

Por otro lado, cuando he leído la palabra “paper”, lo que he pensado es que, buena suerte guiándose por papers, entre las dificultades metodológicas de medición, los intereses variopintos de los autores, etc, hay que ser todo un experto para tener clara la importancia relativa o la conclusión absoluta que se puede obtener de ellos. Se lo dice alguien que cree que es la verdadera fuente de conocimiento, pero soy altamente escéptico por que conozco la dificultad de intentar responder ciertas preguntas, por eso, a menudo, es la acumulación de conocimiento y no un solo paper el que determina la dirección a tomar, en muchos casos hay que saber bregar precisamente con MUCHA incertidumbre, por eso también me hace gracia.

No es cuestión de ser más o menos pesado, es cuestión de como llegar a conseguir un objetivo con el menor coste posible. Sin entrar en todo el debate de fondo ( la función de utilidad, la manipulación etc ), la cuestión es que en cualquier negociación/venta/relación hay que saber qué cartas y deseos tiene cada uno y después saber como usarlas mejor, incluso ser generoso respetando el momento y los deseos del otro aunque no vayan en la misma dirección que los propios, insistir es una táctica válida, pero dependiendo del contexto puede conseguir el efecto contrario al deseado, usted seguirá insistiendo, por lo que cerramos el círculo de mi argumento previo sobre como a veces podemos ser irracionales y cabezotas por muchas razones :upside_down_face:

No me enrollo más.

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