El hecho de que los incentivos juegan un papel enorme en cualquier actividad humana es algo que cualquiera que invierta conoce bien.
Quizás lo complicado es interpretar como van a actuar en algún aspecto ya concreto. De hecho entre los participantes en cualquier cuestión económica hay interpretaciones distintas de los mismos y por eso hay tanta cantidad distinta de actividades económicas.
A veces incluso dentro de la misma inversión, como puede ser invertir en un mismo activo, fondo o acción, hay disparidad de tesis distintas e interpretaciones distintas de los distintos incentivos.
Me gustó mucho al respecfo el libro Inversión en Valor - Martin Whitman . Creo que trata de forma mucho más completa la percepción excesivamente restringida del papel que juegan los distintos incentivos económicos en toda clase de procesos que ocurren en las inversiones.
Por ejemplo la alienación o desalineación de intereses entre accionistas, directivos o bonistas de una empresa, los procesos de suspensiones de pago, de ofertas de adquisición, de salidas al mercado o incluso el papel de las legislaciones concretas, no son ni mucho menos algo fácil de interpretar en la práctica y condicionan la evolución de muchos de estos hechos.
Vamos negar los incentivos en los mercados es un error grave, pero creerse que los incentivos van a ir en una dirección concreta suele terminar siendo delicado también.
De hecho la aplicación de lógicas binarias en procesos de cierta complejidad suele ir bien para ver la inviabilidad de ciertas opciones pero menos bien para entender que los escenarios finales y las dinámicas intermedias suelen posibilitar muchas más opciones y problemas de los que pueda parecer de entrada.