Ese punto es muy interesante. Una cosa es que sea imposible tomar decisiones con una base de prueba equivalente a un ensayo clínico, y otra es que esta situación nos obligue a tomar decisiones a ciegas o rechazando las herramientas de las que disponemos (sean estas estadísticas, probabilistas, o lo que sea), aunque sólo sea por arrinconar la arbitrariedad al máximo (respeto al que opere en base a las entrañas, eh? a sus decisiones quizá no tanto!! ).
No quiero decir que lo están haciendo uds, ok? simplemente me ha hecho reflexionar con respecto a lo comentado anteriormente.
Y aquí entro un poco a hablar del sexo de los ángeles… Pueden saltárselo tranquilamente porque tiene mucho de “auto reflexión” sobre lo que hemos comentado hace ya varios días.
La reflexión roza el 0 de importancia y tiene algunas cosas evidentes y otras que me han hecho pensar un rato. Lo formateo entre comillas para que se lo salten más tranquilamente aún.
En relación a la lógica, la ciencia y las predicciones aplicadas en las conversaciones de hace unos días (recomendar a corto gestión activa y a largo gestión pasiva, en función de tu horizonte temporal), si se va a argumentar en un razonamiento que una esperanza matemática de una estrategia X a corto puede diferir de la misma a largo, no puede ser por un tema de cálculo en su sentido algebraico (la esperanza matemática ya supone una reiteración infinita, sería absurdo que con las mismas variables dependiera del número de iteraciones - eso sí, a cada escenario su cálculo. No es lo mismo calcular sacar un 6 tirando un dado que calcular sacar un 6 un determinado número de veces tirándolo otro determinado número de veces, pero nos vamos por las ramas- ).
En ese caso, si se va a valorar la posibilidad o no de que la esperanza matemática difiera a corto y a la largo, esa diferencia debe ser por las propias consideraciones a realizar en ambos casos, no por el propio cálculo (el que sea). En cierto modo hay una (casi) imposibilidad de modelar en los mismos términos un escenario a corto y otro a largo o, como poco, ambos casos sí podrían ser ser modelables pero difícilmente comparables ya que (considero al menos) en uno y otro caso intervienen variables distintas lo que puede arrojar resultados no comparables .
Eso nos lleva a una situación en la que, sinceramente, soy consciente de que hay espacio para el error.
Igual es imposible que una esperanza matemática a favor de una estrategia A en el corto se invierta a favor de la B en el largo plazo y en consecuencia es obligatorio que coincidan (como los lados de un balance) y esa aparente paradoja está motivada simplemente por la dificultad de dar con un “modelo unificado correcto” que haga comparables las dos escalas temporales (joder, como siga por ahí tendré que meter aquí la teoría de cuerdas!!! )
Porque, si voy a aceptar que pueden diferir en función del plazo considerado y estoy tranquilo con esa dificultad de comparar un resultado con otro, sí resultaría factible el que se pueda recomendar una a corto y otra a largo (no es tan distinto a una valoración de empresa: según con que variables se valore, el resultado variará).
Quedaría la opción intermedia que han sugerido, repetir la jugada a corto cada iteración. En ese caso, se aplicaría lo mismo comentado anteriormente, puedes modelar resultado, simplemente creo que, si es para estimar tu éxito futuro acumulado a largo plazo, no limitado a los primeros 10 años, se deberían considerar también variables relacionadas con la reiteración, la adaptabilidad al dinamismo de los mercados (según el ciclo, por ejemplo, o nuestra capacidad para corregir con su timing las cosas), algún cisne negro (del que no podremos modelar su frecuencia en base a datos previos), reacciones psicológicas, etc, etc, lo que hace que estemos hablando de una situación con mucha mala leche, y con mucho arte involucrado…
Si no fuera por esa mala leche y el espacio reservado a la incertidumbre de los cálculos (síndrome GIGO por ejemplo) la verdad es que la situación no tendría nada de paradójica, recomiendas la que más probabilidad arroje y a tirar millas (como muchos habéis apuntado)
En definitiva, una defensa de la toma de decisiones lo más racionales posibles (acorralando la arbitrariedad) pero siendo conscientes de las limitaciones e incertidumbres del deporte en el que nos hemos metido!!
Todos sabemos que si fuera por evitar hundir el barco a toda costa, el trabajo del capitán sería tan sencillo como no salir nunca del puerto, lo que no serviría absolutamente para nada, así que, al lío!! y suerte a todos!!! (si es que existe )
Y no sigo, que ya es otro tocho!! y de seguir sólo nos va a llevar mucho más cerca de ningún sitio!!
Un saludo a todos!